Los futuros de trigo culminaron la jornada con saldos mixtos. Luego de una tercera noche de ataques rusos a los puertos ucranianos, creció la preocupación por las interrupciones de las exportaciones necesarias para satisfacer la demanda mundial y evitar la suba de los precios de los alimentos. A su vez, el ministro de defensa de Rusia ha emitido un comunicado en el que declaró que, a partir del 20 de julio por la mañana, todo buque identificado que se dirija a un puerto ucraniano sería considerado potencial portador de carga militar. "Esto también elevó el riesgo de represalias de un modo que podría amenazar la disposición de cargadores a transportar grano a través del Mar Negro" dijo Arlan Suderman, economista jefe de materias primas de StoneX.

Los contratos de maíz cerraron con pérdidas, debilitados por la toma de ganancias. Sin embargo, las perspectivas de calor y clima seco en las principales zonas productoras del Medio Oeste de Estados Unidos junto con los ataques rusos a los puertos ucranianos contuvieron los descensos.

Los futuros de soja cerraron mayoritariamente al alza, aunque con pérdidas en algunos contratos. Una ronda de ventas por toma de ganancias de los agricultores y la debilidad en el mercado al contado presionaron los precios de algunos contratos. No obstante, las preocupaciones por un devenir climático cálido y seco en el Medio Oeste de Estados Unidos sostuvo el precio del resto de los contratos.

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