Resumen del Informe Región Núcleo


Por las heladas el trigo regular y malo creció más de un 60%  

En una semana, la condición pasó de 500.000 ha a 820.000 ha en la región núcleo por las heladas de la semana pasada. De la última, la del 21, todavía no se sabe el impacto. De no ocurrir lluvias importantes pronto, habrá una reducción de rendimiento del 30 al  50 % en la región.

A partir del próximo martes, el avance de un sistema frontal frío podría desarrollar algunas lluvias y tormentas en forma aislada.

"Los pronósticos para lo que resta de agosto no son favorables y es poco probable un cambio significativo hasta la segunda quincena de septiembre", comenta José Luis Aiello, Dr. en Cs. Atmosféricas.

Ya más de la mitad del trigo está regular y malo en la región

En plena sequía, pasando el peor agosto de los últimos 10 años, al trigo lo atacan desde un nuevo frente, con sucesivas heladas intensas por sus valores térmicos y graves por la gran cantidad de horas que los cultivos permanecen con los suelos bajo los cero grados. En una semana, la condición regular a mala subió 320.000 mil haDe 1,6 M ha de trigo sembradas en la región, ya son 820.000 las hectáreas que están en estas condiciones. 160.000 mil ha están malas: muchas ya se dan por pérdidas y van a ser pasto para los animales en poco tiempo. Los cuadros de ciclo largo, sembrados con mejores condiciones de humedad y fertilizados son los que en mejor estado están. Ante una inminente lluvia podrían reactivar su crecimiento. La mala noticia es que estos lotes constituyen menos de la mitad del trigo de la región.

 

El NE bonaerense, donde mejor estaba el trigo,  sufrió heladas negras

Tras el veranito que dejó máximas por encima de los 25°C, en los días 12, 13 y 14 hubo heladas muy intensas que dejaron a los cultivos con el aspecto de haber sido quemados. En Pergamino comentan que en el suelo midieron temperaturas inferiores a los 10 grados bajo cero. El frío impactó de lleno en los trigos, pero también en legumbres dejando lotes perdidos de arvejas y lentejas. El efecto fue muy desparejo, la gravedad depende de la variedad, fecha de siembra, presencia de rastrojo, humedad y posición del lote en el relieve, "aunque también se han afectado lotes de lomas". Y por supuesto en función de la humedad, los que recibieron algunos milímetros más, se notan mucho mejor. Un lote que fue regado con 15 mm no mostró impacto del frío”. Esta zona contaba con mejores reservas de agua, se había alcanzado a fertilizar bien, era el área que más prometía en rindes trigueros, con lotes con bajo desarrollo pero llevando bien la seca. Y se apostaba al regreso de las lluvias a fin de mes y una gran recuperación. "Se apuntó a que los trigos exploten por encima de los 50 quintales. Y ahora vemos roya y así no tiene mucho sentido hacer controles". "No sabemos qué va a pasar y  cuál puede ser la reacción: "con lluvias es una cosa, con otra helada intensa más, otra muy diferente", explican los ingenieros. Lamentablemente, el día de ayer, el 21, hubo otra helada.

20/8: el día de un evento muy desafortunado que puede marcar el fin de muchos lotes trigueros 

En Villa Reynolds, San Luis, se registraron mínimas inferiores a los -12°C. Toda la provincia de Córdoba quedó sumergida por debajo de los -5°C superando al núcleo frío del sur de Buenos Aires.

En la región núcleo, de temperaturas máximas de 30 a 33°C registradas el 6 de agosto se pasó a mínimas de -6°C en la madrugada 20/8. En Córdoba se registraron temperaturas inferiores a los 0°C por más de 7 horas.

La magnitud de los daños de la helada se profundiza por su larga duración, la baja humedad relativa y un suelo seco con más de 4 meses sin recibir agua. Durante esta etapa fenológica, los meristemos de crecimiento no son afectados ya que se encuentran protegidos a nivel del suelo. Pero la afectación en hojas y macollos tendrá un efecto negativo sobre el rendimiento final. "Los trigos encañarán muy pobres, probablemente harán una espiga por planta y eventualmente sumarán la de algún macollo”. De no ocurrir lluvias importantes pronto, habrá una reducción de rendimiento del 30 al  50 % en la región.