INDICADORES CLIMÁTICOS


Lo que viene, el pronóstico para la semana próxima en la región núcleo

Regresan las lluvias a la región

Desde el domingo hasta el martes se prevén lluvias y tormentas intermitentes y dispersas que abarcarán gran parte de la zona GEA.

Desde este jueves 17 hasta el sábado se prevén condiciones de tiempo relativamente estables, con viento prevaleciente del sector norte que mantendrá las temperaturas muy por encima de los niveles normales estacionales.

Desde el domingo hasta el martes se desarrollará un período de tiempo inestable, con lluvias y tormentas intermitentes y dispersas que abarcarán gran parte de la zona GEA, con un descenso térmico muy marcado. A partir del próximo miércoles volverían las condiciones de estabilidad a toda la región.

Los registros térmicos experimentarán cambios significativos a lo largo de los próximos siete días con valores muy elevados en el inicio del período de pronóstico y un marcado descenso, tanto de los valores mínimos como de los máximos, a partir del próximo lunes.

La circulación del viento se mantendrá del sector norte durante la primera mitad de la semana y luego cambiará al sur fomentando el descenso térmico en toda la región.

La cobertura nubosa será variable hasta el sábado inclusive. Entre el domingo y martes el cielo se mantendrá cubierto y la semana de análisis concluirá con cielo mayormente despejado.

La humedad en las capas bajas de la atmósfera inicialmente también será muy significativa y se mantendrá así durante gran parte del período, recién a partir del próximo martes o miércoles se producirá una marcada disminución de la misma.

Lo que pasó con el clima en la última semana en la región núcleo

Precipitaciones muy desparejas en la región GEA

Se  midieron registros muy superiores a los 50 mm y zonas que apenas llegaron a los 10 mm.

Los casos más destacados fueron las localidades de Pergamino, en Buenos Aires, con un registro de 93,6 mm, seguida por Villegas, en la misma provincia, con un total de 78 mm. El caso opuesto fue María Teresa, en Santa Fe, con apenas 10,2 mm a lo largo del período de análisis.

Las temperaturas presentaron valores muy elevados para la época del año y superiores a los de la semana pasada, ya que se mantuvieron entre 34ºC y 37ºC. El registro máximo fue medido en la localidad de Idiazabal, en Córdoba, con una temperatura de 38,4ºC. Las mínimas fueron levemente inferiores a los promedios normales estacionales pero superiores a las registradas el periodo anterior, con valores que oscilaron entre 10ºC y 13ºC. El dato más destacado fue el de Hernando, en Córdoba, con 8,5ºC.

Si bien las lluvias fueron importantes y se suman a las que se recibieron hacia fines de octubre los mapas de condición hídrica no presentan cambios significativos respecto de la semana pasada. No se terminan de afianzar mejoras sustanciales por lo que la mayor parte de la región mantiene condiciones de sequía con zonas puntuales, donde se recibieron los mayores acumulados, que muestran características entre escasas y regulares.

Analizando la tendencia para los próximos quince días se mantiene la necesidad de lluvias muy abundantes en gran parte de la región, con promedios entre los 100 y 140 mm para lograr condiciones óptimas en el perfil del suelo.

 

 

Extensión GEA: O de Córdoba, N de Santa Fe, Santiago del E. y Chaco

Las precipitaciones continuarán por debajo de las normales hasta fines del 2022

La primera quincena de noviembre se despidió con buenas lluvias en la mayor parte de la región pampeana.

Las lluvias que se desarrollaron durante el segundo fin de semana del mes fueron generosas aunque muy desparejas, dejando como saldo sectores ganadores y perdedores. En buena parte del país el agua recibida, se convirtió en fundamental para lograr una moderada recomposición de los perfiles que permitirá un avance más generalizado y acorde a los calendarios normales de siembra que venían muy retrasados.

Los registros, en la mayor parte de la región núcleo, promediaron entre 20 y 40 milímetros pero, en sectores puntuales sobre el sudoeste de Córdoba, oeste y norte de Buenos Aires y centro de Santa Fe, esos valores se duplicaron, incluso superando los 90 milímetros en pocas horas.

Queda claro que, con un déficit de agua en el suelo cercano a los 160 milímetros arrastrado durante meses, las precipitaciones recibidas solo posibilitan una recomposición de la capa superficial para encarar las tareas de siembra pero están lejos de solucionar el problema de fondo.

Esto se ve claramente en los mapas de disponibilidad hídrica donde prácticamente no se han modificado las condiciones de reserva de agua más allá de aquellos sectores acotados en los que el mejor volumen de lluvia recibido cambió las características de sequía a escasez.

Por el momento estas fueron las mejores lluvias de la primavera, tanto por volumen como por área de cobertura, pero iniciamos un periodo de alta demanda atmosférica, superior a los 6 milímetros de lámina de agua perdida por día.

Las siembras implantadas en el límite del calendario deberán contar con alguna provisión pluvial que compense las perdidas por evapotranspiracion y en ese sentido los pronósticos de corto plazo muestran, para los próximos siete días, altas temperaturas y la probabilidad de eventos pero con registros inferiores a los recibidos esta semana.

Las proyecciones de escala global continúan mostrando un significativo enfriamiento del pacifico ecuatorial central por lo menos hasta el primer bimestre del año próximo. Esto indica que, más allá del buen momento actual, muy probablemente las precipitaciones continuarán por debajo de las normales hasta fines del 2022 por lo tanto, el manejo y la planificación eficiente de los cultivos que se implanten con el agua recibida, determinarán la continuidad y el resultado final de la campaña gruesa.