INDICADORES CLIMATICOS


Lo que viene, el pronóstico para la semana próxima en la región núcleo

Entre chaparrones y tormentas dispersas. La temperatura baja a partir del lunes

Entre el jueves 6 y el miércoles 12 de julio se esperan condiciones de tiempo inestables. El descenso térmico se espera a partir del lunes 10 con posibilidad de heladas el día miércoles 12.

Durante el jueves 6, se prevén chaparrones y tormentas leves y dispersas que se irán desplazando de sur a norte dando paso a condiciones de estabilidad rápidamente. La probabilidad de precipitaciones, regresa hacia la noche del viernes 7. A partir del día sábado retornan las condiciones de estabilidad  hasta el lunes 10. A partir del lunes, la llegada de un sistema frontal frio provocará un nuevo aumento de la probabilidad de lluvias débiles e intermitentes. El sistema se desplazará de sur a norte durante ese mismo día dando paso a buen tiempo hasta el final del periodo.

Las temperaturas se mantendrán por encima de las normales estacionales hasta el domingo 9 de julio, con máximas oscilando entre los 14  y 17°C. A partir del lunes 10, con la llegada del frente frío, los registros sufrirán un marcado descenso alcanzando valores entre 9 y 12°C que se mantendrán hasta el final del periodo de pronóstico.

Las temperaturas mínimas experimentarán una disminución progresiva desde el jueves 6. Las marcas se ubicarán entre 3 y 6°C, hasta el lunes 10 de julio. La irrupción de una masa de aire frío provocará una marcada caída de los registros. Habrá valores extremos el miércoles 12 con -2 a 0°C, provocando la heladas dentro de la zona GEA.

Lo que pasó con el clima en la última semana en la región núcleo

Escasas lluvias en la región y temperaturas  de hasta 29 °C en pleno invierno

Entre el jueves 29 de junio y el miércoles 5 de julio se registraron escasas precipitaciones en la zona GEA. Las lluvias  fueron muy heterogéneas y oscilaron entre los 4 y 5 mm. El registro más alto fue  en Chacabuco, Buenos Aires, con 5 mm. Le siguieron Baradero (Buenos Aires) y Bigand (Santa Fe) con 4 mm.

Las temperaturas presentaron valores elevados para la época con máximas entre los 24 y 29°C. El valor más alto  se registró en Colonia Almada (Córdoba), con un valor de 29,1°C. Las mínimas tuvieron una distribución geográfica, con dos núcleos de valores extremos, uno en el noroeste del área GEA, en la localidad de Hernando, donde se midió la marca térmica más baja de –2,5°C y otro ubicado en Buenos Aires con valores de temperatura que oscilaron entre -1 y 0°C.

Con este panorama de muy escasas precipitaciones las reservas hídricas prácticamente no sufrieron cambios respecto del periodo anterior. Se percibe un leve aumento de agua en el suelo en el centro de la provincia de Buenos Aires, dentro del área GEA, que mantiene la humedad entre regular y adecuada, mientras que los niveles decrecen hacia el oeste provocando condiciones entre escasez y sequía.

Con este escenario se requiere, en los próximos quince días, que los acumulados en el oeste del área GEA oscilen entre los 20 y los 100 mm para alcanzar el estado óptimo de las reservas, mientras que sobre el este no es necesaria la ocurrencia de precipitaciones.

 

Extensión GEA: O de Córdoba, N de Santa Fe, Santiago del E. y Chaco

Temperaturas elevadas y lluvias débiles hasta la mitad de julio

Al igual que Junio, en los primeros días de Julio, se mantuvo el comportamiento anómalo de las condiciones atmosféricas, atípicas para el semestre frío. La influencia de centros de alta presión circulando desde el oeste hacia el Atlántico favoreció el persistente ingreso de viento del este y del noreste hacia el centro de la región pampeana. Un comportamiento poco frecuente para esta época del año, cuando la circulación debería ser exactamente la contraria.

Las temperaturas continúan por encima de las normales estacionales. Sigue la dificultad para que flujos de aire más frío avancen desde el sur hacia el norte, impidiendo el enfriamiento del ambiente y la posibilidad de capitalizar la humedad acumulada en forma de precipitaciones.  

Es bien conocido que el régimen pluvial del semestre frío es más bajo sobre la zona núcleo pero, aun así, junio concluyó con registros muy por debajo de la media. Julio se inicia con la misma tendencia. Este comportamiento muestra la nula influencia que por el momento está ejerciendo el prematuro establecimiento del Niño frente al peso de los mecanismos regionales y extra Pacifico.

La excepción es el sudeste bonaerense, donde los primeros cuatro días del mes acumularon registros superiores a los 100 milímetros, casi el doble de la media mensual, provocando excesos de agua en los perfiles de las zonas cercanas a Balcarce, Necochea y Mar del plata, que no presentaban necesidades hídricas relevantes.

Por su parte la franja oeste de la región pampeana sigue muy seca, con una escasez de reservas similar a la del año pasado y un requerimiento de agua que parece muy difícil de resolver con lluvias dentro, o levemente sobre la media.

Los pronósticos de corto plazo indican una continuidad de las condiciones atípicas: alta carga de humedad, temperaturas elevadas y algunas lluvias débiles y aisladas hasta el inicio de la segunda década del mes. Luego, el ingreso de un frente frío provocará algunas precipitaciones, llegando desde el sudeste hacia este, perdiendo volumen en el trayecto, y un marcado descenso de las temperaturas que podría provocar heladas sobre la zona núcleo.