SUBZONAS Y RED DE ESTACIONES METEOROLÓGICAS GEA

SUBZONA I

En Carlos Pellegrini se sembraron todos los lotes de trigo que estaban previstos. Se estima que la superficie sembrada fue un 30% menor que la del año pasado. “Se quería sembrar por necesidad económica, pero las condiciones climáticas no permitieron sembrar un mayor hectareaje”, comentan los ingenieros. En cuanto a las proyecciones de siembra de maíz, se estima que la superficie se mantendrá respecto a la campaña anterior. “El área de soja de primera aumentará un 30% y la de segunda disminuirá un 30%”, dicen en la zona.

Ya se sembraron todos los lotes con trigo en María Susana, “ahora se continúa con los pocos que se van hacer con de arveja”, dicen los técnicos. Los últimos lotes sembrados con el cereal fueron fertilizados, “pero no llovió después”, dicen. De todos modos, están muy bien nacidos y con un vigor aceptable. Esto se debe a la mineralización que hubo en los lotes donde la soja anterior de 3 a 4 quintales no alcanzó para extraer nutrientes, quedando disponibles para el trigo actual. De esta forma, “el cereal tiene grandes posibilidades de expresar un buen rendimiento de no ocurrir heladas tardías y ataques de hongos”.

SUBZONA II

En Bigand se pudo completar la siembra del trigo intencionado. Se sembró un 5% más que el año pasado. Los ingenieros comentan que en la campaña pasada, la siembra de trigo fue reducida por falta de humedad, lo mismo que maíz temprano: “se pudieron sembrar muy pocos lotes”, dicen. Este año, se estima que la superficie de ese cultivo crecerá un 10%. “En cuanto a la superficie de maíz tardío de la campaña 22/23, fue excepcional, debido a las dificultades para la siembra de maíz temprano. Por lo tanto, de haber buenas condiciones de siembra se hará como maíz temprano”. El área de soja de primera crecerá un 30% y la de segunda, un 5%.

SUBZONA III

“Hace menos de un mes terminamos la cosecha de soja. Termino muy mal: rindió entre 6 a 10 qq/ha y con problemas de humedad”, dicen en la zona de San Pedro y alrededores. El maíz también ha sido muy afectado. En la zona predominó el maíz de segunda. “Se picó mucho. También se enrollo. De lo que queda por cosechar es incierto el rinde, se habla de 30 qq/ha a 60 qq/ha y algunas excepciones de 100 qq/ha”. En cuanto a la siembra de trigo,  los técnicos dicen que también  tuvieron muchas dificultades por las condiciones climáticas. “La elevada humedad  ambiental y cosecha de soja tardía, dificultaron hacer los barbechos a tiempo y el ingreso a los lotes a sembrar. “Se atrasó todo y se hizo a las apuradas”, dicen los técnicos. En el área, no se pudo sembrar todo lo que se pensaba hacer a inicios de campaña. “Había muchas expectativas pero los costos elevados han llevado a que la cantidad de trigo cultivado sea menor a lo esperado. Se sembró solo un 20% más que la campaña pasada”. Hoy la siembra de trigos largos está terminada: “resta algo de trigo corto en particular entre los productores batateros, ya que la cosecha de la hortaliza no permite una siembra de trigos largos”, explican en la zona.

SUBZONA IV

Este año se ha reducido significativamente la superficie sembrada de trigo en  partido de General Villegas en comparación con el año anterior. “Estimamos una caída alrededor del 60%. Incluso hay empresas solo han hecho un 20% del hectareaje que sembraron un año atrás. Otras no han sembrado nada”. Respecto a la intención de siembra maicera, los técnicos zonales estiman que el 50% de la superficie que no pudo hacerse con trigo pasará a maíz. También advierten: “debería llover bastante entre fin de agosto y septiembre, con los perfiles de hoy no se podría sembrar temprano”. “Se están haciendo los barbechos abiertos con residuales que no limiten la posibilidad de cambiar entre maíz y soja. Por lo que iremos viendo y definiendo sobre la marcha”.

SUBZONA V

En los alrededores de Viamonte (sudeste cordobés), “la siembra de trigo cayó por la falta de lluvias”. Los técnicos explican que hubo dos tandas muy cortas de siembra, aprovechando las lluvias escasas que se produjeron en el área. “Hubo fue muy temprana, duró no más de 10 días y la otra se hizo hace poco”, dicen. “En los Quirquinchos había mucho entusiasmo inicial de siembra triguera, pero fue pasajera. “Si bien se sembró menos que el año pasado, un 10 a 20% menos, la caída no fue tan abrupta como resultó hacía el oeste, adentrándose más en Córdoba”. De la intención de siembra maicera, los técnicos dicen que todo es muy incierto aún. “Todavía faltan cerrarse muchos acuerdos de alquileres. Ante la duda, el productor se volcaría a soja. Pero en el sudeste cordobés el maíz tardío pisa fuerte, así que siempre se mantiene una superficie importante. La superficie del temprano va a ir de la mano del clima”.

En Corral de Bustos se sembró menos trigo que lo intencionado: un 20 a un 30% menos que el año pasado. “¡Los perfiles están sequísimos! ¡Y ayer registramos 30 °C! Falta mucha agua en los suelos. Hicimos una última medición de agua tras la última lluvia importante (finales de mayo) y hay solo 60 milímetros a los 2 metros. Esto va a condicionar la siembra temprana de maíz. Tiene que llover mucho entre agosto y septiembre. ¡Necesitamos unos 300 milímetros!”. Agregan que, por el momento, están haciendo todos los barbechos abiertos, con residuales que les permitan elegir entre hacer soja o maíz, según como evoluciones el clima. En el área estiman que la superficie de maíz temprano, en caso de llover, se mantendría, y que lo que no se hizo de trigo se volcaría a soja. ”Pinta un año sojero. Con la caída de precios del maíz, los márgenes, en particular en campo alquilado, no cierran. Y la otra alternativa que está comenzando a ser opción, es el maíz tardío, que en el área funciona bien”.