Indicadores Climáticos


Lo que viene, el pronóstico para la semana próxima en la región núcleo

Sin lluvias y con heladas

Las temperaturas más bajas se registrarán durante la mañana del viernes 29 de abril, con valores que podrían provocar heladas en gran parte de la región. Las precipitaciones estarán ausentes durante la semana.

Las temperaturas más bajas se registrarán durante la mañana del viernes 29 de abril, con valores que podrían provocar heladas en gran parte de la región. Las marcas máximas de la semana se medirán entre lunes y martes, pero siempre dentro de los niveles normales estacionales. Aun asi, en general, la mayor parte del periodo de pronostico los registros térmicos serán inferiores a los promedios para esta época del año.

La cobertura nubosa tendrá poca presencia ya que las condiciones de estabilidad y la poca humedad fomentarán la escasa nubosidad potenciando una buena radiación solar.

La circulación del viento se establecerá del sector sur en el inicio del período pero, a medida que avancen los días, cambiará al sector oeste y luego al norte, provocando un progresivo ascenso térmico.

La humedad en las capas bajas de la atmósfera tendrá poca presencia, especialmente durante la primera mitad del período. A medida que avance la semana se espera que comience a incrementarse muy lentamente, y recién hacia el inicio del próximo período se espera que la humedad comience a incrementarse de manera más significativa en la región.

 

 

Lo que pasó con el clima en la última semana en la región núcleo

Precipitaciones recostadas sobre el este de la Región

Los registros oscilaron entre 5 y 20 mm. Los acumulados más importantes se concentraron sobre el noreste de Buenos Aires y el centro-este de Santa Fe, mientras que sobre el centro de Córdoba fueron muy escasos.

El registro más destacado fue el de Irigoyen, Santa Fe, con 30,8 mm, seguido de Baradero, en Buenos Aires, con 28 mm.

Las temperaturas presentaron valores dentro de los niveles medios estacionales, con máximos moderados, pero acordes a la época del año, entre 26ºC y 28ºC, muy similares a los de la semana pasada. El registro más elevado fue el de la localidad de Noetinger, en Córdoba, con 30,3ºC.

Las temperaturas mínimas fueron levemente inferiores a las del periodo anterior, con valores dentro de los niveles medios entre 4ºC y 7ºC. El valor más bajo,  3,8ºC, se registró en la localidad de Chacabuco, Buenos Aires.

Con las lluvias recibidas en la última semana se siguen afianzando las buenas condiciones hídricas en la mayor parte de la zona GEA. En general se observan reservas adecuadas y sólo en Córdoba se mantienen entre regulares y escasas.

En los próximos quince días se necesitarían registros de lluvia moderados en parte de Córdoba, con promedios entre 40 y 60 mm, para lograr condiciones óptimas de humedad. En el resto de la zona GEA con lluvias inferiores a los 20 mm se mantendrían las buenas reservas hídricas en toda la región.

 

 

Extensión GEA: O de Córdoba, N de Santa Fe, Santiago del E. y Chaco

El oeste, con reservas de agua muy ajustadas para la campaña fina

En los últimos siete días el ingreso de dos frentes fríos capitalizó, en forma de lluvias y tormentas, el importante contenido de humedad atmosférica acumulada por la persistente circulación del viento noreste.

En ambas oportunidades la distribución territorial fue muy similar, con una destacada preponderancia de los mayores acumulados sobre el este y un gradiente descendente que prácticamente dejó fuera de la oferta de agua toda la franja mediterránea del país.

Algunas precipitaciones, con registros de poca relevancia, llegaron al centro este de Córdoba, pero el aporte de agua sobre el resto de la provincia fue muy escaso y completamente insuficiente para reducir los altos requerimientos que están condicionando la recuperación de los perfiles.

El estado y la clasificación de las reservas de agua en el suelo no han cambiado demasiado en la última semana, fundamentalmente debido a que estas últimas lluvias presentaron una distribución de los mayores acumulados coincidente con los sectores que disponían de mejores condiciones hídricas.

La situación no es alentadora para la franja oeste mediterránea. El comportamiento pluvial del mes de abril no ha provocado mejoras significativas en ese sector y, con el avance del otoño, estamos ingresando al periodo en el cual es cada vez más difícil que se registren lluvias abundantes sobre el oeste del país.

El ingreso del último sistema frontal, cargado de aire más frío y seco, establece condiciones de estabilidad que, según muestran los pronósticos de corto plazo, difícilmente cambien hasta el final de abril. Si esta tendencia se mantiene en la transición hacia el mes de mayo las posibilidades de revertir la escasez de reservas, en las áreas más complicadas del oeste, se vuelven cada día menos probables pensando en las necesidades para los cultivos de invierno.