SUBZONAS Y RED DE ESTACIONES METEOROLÓGICAS GEA

SUBZONA I

En Carlos Pellegrini terminaron la siembra de trigo. A la intención de siembra inicial, que era igual a la del año pasado, se le agregaron algunos lotes más. “Hay cuadros ya emergidos en muy buen estado, favorecidos por las temperaturas moderadas a cálidas, poco usuales para la época”, dicen los técnicos. Sin embargo las reservas de agua en el área son muy pocas: ya preocupan las lluvias insuficientes que está dejando el invierno. “Si las temperaturas continúan por encima de lo normal para la época y se produce baja ocurrencia de  heladas, el desarrollo del cultivo puede acelerarse, aumentar la demanda hídrica y caer así el rinde potencial”, explican. Por otro lado, otro factor que incide en los rindes es el nivel de fertilización, que esta campaña  fue inferior a lo normal o directamente no se aplicó. Hay dos causas: una, fue la  incertidumbre de no tener la cantidad de agua adecuada durante el ciclo. Y la otra es la imposibilidad de invertir. “Este año se realizó un planteo defensivo, atentos a refertilizar si la condición hídrica mejora”, explican los técnicos.

Se completó la siembra de trigo en El Trébol, incluso se sumaron algunos lotes a la intención de siembra inicial. Lo implantado está emergiendo en muy buenas condiciones. Con las reservas de agua que hay actualmente, si hay buenas lluvias en septiembre, los ingenieros proyectan 40 qq/ha. En cuanto a la fertilización, los técnicos indican que en macollaje evaluaran si completaran las dosis de nitrógeno. 

Finalizó la siembra de trigo en María Susana. Los lotes están naciendo en muy buenas condiciones. Los días húmedos y fríos evitan la evaporación y se mantiene la humedad del suelo. Hay suficientes reservas de agua para las primeras etapas de crecimiento del cultivo. “Estamos fertilizando aprovechando los pronósticos de lluvias que daban para esta semana”, comentan los ingenieros. Pero sin lluvias en el final de junio, habrá que ver la efectividad de estas aplicaciones. “Ante un panorama de un año “Niño”, tenemos expectativas de buenos rindes: superiores a 40 qq/ha”, concluyen.

Finalizó la siembra de trigo en Cañada de Gómez. Los lotes implantados están naciendo en muy buenas condiciones. Los ingenieros calculan que el cultivo podría alcanzar un rinde de 30 qq/ha. Incluso, “si las condiciones climáticas acompañan, se refertilizará el cultivo apuntando a rindes superiores a 50 qq/ha”, agregan.

Se terminó se sembrar el trigo en la zona productiva de Rosario a Aldao. “Es más área que el año pasado, pero menos que hace dos ciclos“, explican. La posibilidad de un setiembre que deje efectivamente 100 mm enciende las posibilidades productivas del trigo y buenas perspectivas para la siembra maicera. Pero también hay temores: “puede haber graves problemas con fusarium que afecten los rindes de trigo. Y tener riesgos de perder siembras de maíz por anoxia”, explican los técnicos. En cuanto a la fertilización de este año, en la zona dicen que la fertilización se hizo “barata” aprovechando la fertilización que dejó la seca. “Hasta agosto alcanza, luego se verá si refertiliza en función del estado del cultivo y, según cuanto frío tengamos, la tasa de macollaje que alcancemos”. “Si no hay frío, y no hay macollos, el potencial de trigo puede quedar seriamente limitado”, advierten en el área.

SUBZONA II

Se completó la siembra de trigo en Bigand. Los ingenieros remarcan que la superficie sembrada se asemeja a la del año pasado pero es inferior a la implantada en la campaña 2021/22. En los lotes emergidos se observan buenos nacimientos y mucha uniformidad. Los técnicos señalan que “con la reserva de agua actual y si las lluvias de septiembre no acompañan, el rendimiento del cultivo será bajo”. “La esperanza de una buena producción está (en las lluvias de) setiembre”, dicen. Ante pronósticos de lluvias los productores están dispuestos a ajustar la base nitrogenada.  “Existe la intención de aplicar más fertilizantes nitrogenados si mejora la humedad”, comentan.

“¡Imposible sembrar trigo!”, exclaman los ingenieros de Sancti Spiritu: “solo llovieron 37 mm en mayo y nada en junio”, explican. “De no llover la semana que viene, no sembraremos el cultivo. Esos lotes los destinaremos a maíz. La campaña de trigo está lejos de pintar grandes volúmenes de producción”, dicen.

SUBZONA III

El 95% del trigo ya está implantado en Colón. Pero  la superficie sembrada en el área  es un 40% menor que la campaña pasada. “Luego de la lluvia de mayo, hubo mucha intención de siembra, mucha “espuma” que se desinfló. Hoy vemos una baja importante de superficie”. Los técnicos agregan que los planteos de fertilización fueron muy heterogéneos. Solo algunos productores hicieron planteos completos, otros que no aplicaron nada,  y la otra mayoría realizaron planteos defensivos con 150 a 200 kg/ha de urea, con la idea de refertilizar si llueve durante el invierno. “Con la foto de hoy, con estos niveles de fertilización y agua,  los que mejor fertilizaron apuntan a  35 -40 qq/ha. Y en  los planteos básicos a no más de 30 qq/ha. Sin embargo, al analizar costos versus estas productividades, vemos que en campo alquilado los números no cierran: el rinde de indiferencia es de 40 qq/ha. “La realidad es que muchos productores se jugaron a hacer trigo por una necesidad de “hacer  caja”, es decir mover el dinero y disponer de liquidez allá por diciembre”, explican los ingenieros del área. En cuanto a la campaña gruesa, dicen que proyectan  hacer más superficie maicera que la campaña pasada. “También se evalúan alternativas como el maíz colorado Flint”.

SUBZONA IV

La siembra triguera se da por terminada en General Pinto. El área sembrada sería de un 40 a 50% menor que la del ciclo pasado. Ameghino, Villegas, incluso hasta en Intendente Alvear, ya entrando en La Pampa, tendrían una baja del 50% de área de siembra. “Tendría que haber una lluvia de 40 a 50 mm para que vuelva a sembrarse y sumar área triguera”, explican los ingenieros, milímetros que están totalmente afuera de las marcas estadísticas.

SUBZONA V

Quedaron muy pocos lotes sin poder sembrarse con trigo en Marcos Juárez. “Lo que no se sembró hasta ahora no se va a hacer; se siembran muy poco los ciclos cortos en la zona”, explican los ingenieros. Lo que se sembró tuvo una buena implantación, con un desarrollo normal. Si bien se aplicaron menos fertilizantes que lo que aplica normalmente, se aspira a rendimientos promedios normales para la zona (40 qq/ha). Pero es necesario que no falle el aporte de lluvia desde fin de agosto en adelante. Las reservas de agua en el perfil son escasas (del 35 al 65/70 % del perfil, en el mejor de los casos). Los técnicos agregan que sólo en algunos casos se está pensando en refertilizar el cultivo, si las condiciones climáticas acompañan.