Guía Estratégica para el Agro

Resumen del Informe Región Núcleo


Cayeron entre 200 y 500 mm en el NE bonaerense en mayo, y compromete la siembra triguera

Marina Barletta – Florencia Poeta – Cristián Russo

40% de la región núcleo exhibe excesos de agua y suelos saturados. El trigo del norte bonaerense representa el 20% del total regional y su siembra está comprometida por el exceso de agua.

Vuelve el buen tiempo: heladas y sin lluvias hasta el miércoles 4

Las temperaturas mínimas permanecerán bajas, entre -2° y 0°C, hasta el 1 de junio favoreciendo la ocurrencia de heladas de variada intensidad. Luego los registros experimentarán un paulatino pero leve ascenso.

 

“Las bajas temperaturas se mantendrán los próximos días, incluso en los inicios de junio, acompañadas de buen tiempo y estabilidad atmosférica", dice el consultor Elorriaga.  

Con los 200 a 500 mm de agua caída en el NE bonaerense en mayo la siembra de trigo está complicada

40% de la región núcleo muestra excesos y suelos saturados. De esta manera arranca la siembra triguera con siembras aisladas que totalizan apenas un 2% cuando un año atrás, la implantación iba tomando fuerza con un 12%.

En mayo 2024 llovieron 8 mm como promedio en la región núcleo, mientras que mayo de este año está cerrando con un promedio de 110 mm. En 13 estaciones llovieron más de 130 mm, y en la mitad de estas más de 200 mm. Pero el dato contundente y fuera de escala es el de Chacabuco que cierra el mes con 498 mm. Estos es más del doble que el mayor registro (210 mm en mayo de 2015) de los últimos 20 años, básicamente desde la instalación de nuestra red de estaciones meteorológicas GEA/BCR.

En trigo, el avance de las labores de siembra se presenta muy trabado y con serios problemas

Arrancó la siembra del trigo, con una intención que apunta a un aumento del 10% del área respecto al año pasado, y que de concretarse se alcanzarían 1,66 millones de hectáreas implantadas. Pero hay que tener en cuenta que el trigo del norte bonaerense representa el 20% del total regional y está seriamente comprometido por el exceso de agua. “En este contexto, proyectamos una caída significativa en el área de trigo en el centro y norte de Buenos Aires”, advierten técnicos del área.

En el SE de Santa Fe tambien advierten que no debe llover más para poder sembrar. “Va a ser una siembra muy lenta, muy trabada, se va a enterrar mucho rastrojo. Pero si llueve otra vez, no vamos a poder hacer el cambio a ciclo corto por la baja disponibilidad de semilla y van a quedar lotes sin poder hacer. Y ojo, porque muchos lotes ya tienen puesta la urea”.

¿Se mantienen firmes la intenciones trigueras?

La planilla de Excel muestra que la rentabilidad del cultivo es baja, lo que enfría aún más la decisión del productor. En este contexto se estima que podría haber una caída importante del área de trigo en el norte de Buenos Aires. El impacto alcanza también a otros cultivos de invierno, como la arveja y las crucíferas, que son especialmente sensibles al exceso hídrico. En el NO bonaerense, desde General Pinto, dicen: “es una incógnita cuanto se va a sembrar, hay cero movimiento: ni sembradoras ni gente preguntando por insumos”.

La humedad en el perfil y los beneficios agronómicas sostienen al trigo en la rotación

En otras zonas de la región núcleo las intenciones de siembra se mantienen firmes y ya comenzaron a moverse las primeras sembradoras: “el grueso comienza esta semana, apenas las condiciones climáticas lo permitan”, indican en Carlos Pellegrini, dónde esperan sembrar un 10% más que el año pasado. Desde Corral de Bustos, en el sudeste cordobés, también largaron con la siembra y resaltan: “el contexto económico no entusiasma, pero la humedad en el perfil y los beneficios agronómicos impulsan a los productores a mantener al trigo en la rotación”. En Bigand esperan sembrar un 10% más respecto a un año atrás.

Con márgenes ajustados en todos los cultivos, la rotación define las decisiones

Según los números actualizados al 28 de mayo, en campo propio el resultado es de 90 u$s/ha, pero en campo alquilado la ecuación se da vuelta y da pérdidas de -61 u$s/ha de renta neta, considerando un rinde de 40 qq/ha.

La foto contrasta con lo que pasaba hace exactamente un año, cuando el precio del trigo, medidos en dólares, era 23% superior al actual y los márgenes diferentes. La proyección de márgenes impulsó la intención de siembra, mientras que el escenario es distinto en el presente.

El salvavidas para el cereal es su rol estratégico dentro de la rotación. Cuando se analiza en combinación con una soja de segunda de 35 qq/ha, los márgenes mejoran: en campo propio, dando un resultado de 397 u$s/ha, y en campo alquilado, de 37 u$s/ha.

Asesores desde Colón aseveran que “si no podemos sembrar trigo, vamos a hacer maíz temprano para sostener la rotación de gramíneas”. El maíz temprano muestra números más alentadores, aunque también acotados. Con rindes proyectados de 100 qq/ha, los márgenes estimados son de 434 u$s/ha en campo propio y de 89 u$s/ha en campo alquilado.

Soja bajo agua: el norte bonaerense aún no logra cerrar la cosecha

Al igual que el año pasado, el exceso hídrico vuelve a complicar el final de la campaña de soja en la región núcleo. En 2024, el alivio llegó en el mes de mayo, permitiendo terminar la cosecha a fin de mes con un atraso de casi 30 días respecto al promedio de las últimas cinco campañas. Pero este año, los excesos de agua y las lluvias que no dan tregua en el norte de Buenos Aires impiden avanzar sobre 250.000 ha restantes.  En San Pedro y Baradero aún resta recolectar entre un 10 y un 15% de la soja de segunda, mientras que en Arecifes queda cerca del 20%. Los lotes pendientes de recolectar tienen granos con altos niveles de humedad, en torno al 17%. En los alrededores de Pergamino, aunque una parte importante del agua logró infiltrarse, persisten los encharcamientos. Queda trillar entre 2 y 3% de la soja. En General Pinto, Ameghino y Villegas la soja de primera está casi terminada, pero queda un  15% a 20% de la de segunda.  Más crítica es la situación hacia el centro provincial: en 9 de Julio, el 50% de la soja aún no fue cosechada y hay extensas áreas anegadas. Los caminos rurales están cortados desde hace dos meses, lo que impide incluso acceder a los lotes a caballo o con vehículos. En Carlos Casares la cosecha de soja de primera está terminada, pero aún queda un 30% de la de segunda. “El agotamiento del productor es palpable. Las lluvias comenzaron a principios de abril y no han dado respiro”, señalan desde la zona. En el resto de la región, la cosecha de soja está prácticamente concluída.

Cuando el frío se convierte en un gran aliado

La madrugada del 29 de mayo trajo consigo temperaturas mínimas por debajo de los 0 °C en gran parte de la región núcleo. En el sudeste de Córdoba, Colonia Almada y Hernando alcanzaron -3 °C. En el centro-sur de Santa Fe, Carlos Pellegrini registró -2,1 °C y Rosario, -1,2 °C. En el norte de Buenos Aires, Chacabuco marcó -1,7 °C.

La llegada del frío fue celebrada por el sector, ya que la presencia de chicharritas en los maíces guachos mantiene en alerta a los productores. No solo que todavía está el temos a los estragos que este insecto provocó en la campaña 2023/24, sino que en la últimas semanas se había vuelto a ver una gran presencia de maíces guachos y de chicharrita. Las bajas temperaturas eran muy esperadas para ayudar a reducir su población. Aparte, las heladas favorecen el secado de la soja que queda por cosechar y los maíces que aún permanecen en pie.