Indicadores Climáticos
Lo que viene, el pronóstico para la semana próxima en la región núcleo
Lluvias desde el sábado 12 al miércoles 17
El periodo comprendido entre el jueves 10 y el miércoles 17 de octubre comienza sin lluvias hasta la madrugada del sábado 12, cuando se inicia un periodo inestable que se extenderá hasta el miércoles 17 en la zona GEA.
Durante este periodo se espera la ocurrencia de precipitaciones en forma de chaparrones y tormentas, aisladas e intermitentes con mejoramientos temporarios.
Las temperaturas máximas inicialmente rondarán los 25 a 28°C pero, a partir del viernes 11 los valores descenderán levemente y se mantendrán entre los 19 y 22°C hasta el martes 16, momento en el cual habrá un nuevo ascenso térmico que llevará las máximas a registros entre 24 y 25°C. Las temperaturas mínimas se mantendrán en el rango de los 11 a 14°C, pudiendo alcanzar los 9° durante el domingo 13 en el sur de la zona GEA. Las temperaturas mínimas presentarán un ascenso generalizado a partir del lunes 14 de octubre, llegando a valores de 16 a 19°C.
Lo que pasó con el clima en la última semana en la región núcleo
Precipitaciones concentradas sobre el noroeste de la zona GEA
La semana comprendida entre el jueves 3 y el miércoles 9 de octubre se registraron precipitaciones concentradas sobre el noroeste de la zona GEA, mientras que en el sector sudeste fueron nulas.
El acumulado más alto del periodo alcanzó los 57,4 mm, y se midió en la localidad de Colonia Almada, Córdoba.
Las temperaturas máximas fueron muy elevadas para la época, oscilando entre los 27 y 32°C. Los valores más altos se registraron en el centro/norte de la zona GEA. El valor extremo, 32°C, se midió en la localidad de Godeken, en Santa Fe. Las temperaturas mínimas fueron bajas, en un rango térmico que varió entre 0 y 5°C. Los valores más bajos se localizaron en el noroeste y sudeste de la zona GEA. El registro mínimo extremo del periodo, 0.2°C, se midió en la localidad de Hernando, Córdoba.
Con este panorama las reservas de agua en el suelo persisten en condición de sequía en la mayor parte de la zona GEA y solo en el en sector sudeste alcanzan el nivel de escasas.
Con las actuales condiciones hídricas, en los próximos quince días, se requieren entre 100 y 140 mm en la mayor porción de la zona GEA, mientras que en el sudeste los acumulados necesarios disminuyen a valores entre 70 y 100 mm para alcanzar condiciones de humedad óptimas.
Extensión GEA: O de Córdoba, N de Santa Fe, Santiago del E. y Chaco
El cambio de quincena se encamina hacia un escenario pluvial más productivo
En los últimos siete días la presencia de un sistema de baja presión sobre el océano Pacifico, a la altura de Mendoza, potenció una persistente inestabilidad y reiteradas perturbaciones atmosféricas que dieron como resultado lluvias y tormentas, en algunos casos muy intensas, sobre Mendoza, el centro norte de Córdoba, centro de Santa Fe y Entre Ríos, logrando extenderse hacia las provincias del NOA y la Mesopotamia.
Los registros presentaron una gran variabilidad, tanto de volumen como de distribución geográfica, con acumulados entre 5 y 100 milímetros que privilegiaron el noroeste y centro norte del país, excluyendo la mitad sur de la región pampeana desde el sur de Santa Fe hasta el Río colorado.
Las precipitaciones fueron importantes, superando en algunos casos los valores medios mensuales, y alcanzaron regiones agobiadas desde hace meses por una profunda sequía. Pero resultan insuficientes para recomponer el estado general de reservas de agua en el suelo con un requerimiento superior a los 150 milímetros aunque, gracias a ellas, muchos cultivos podrían mejorar su condición o al menos detener su deterioro.
Ajeno al alivio que plantearon estas lluvias y tormentas quedó el corazón de la zona núcleo. El sur de Santa Fe, Buenos Aires y La pampa no recibieron precipitaciones y, lejos de recomponerse, los perfiles continúan sufriendo la necesidad de agua por el elevado déficit que dejó septiembre, y el invierno en general.
Los pronósticos de mediano plazo muestran un nuevo periodo de inestabilidad para el próximo fin de semana algo que, sumado a las recientes lluvias, podría indicar el tránsito hacia un escenario pluvial más productivo durante el cambio de quincena. Probablemente, los sistemas precipitantes que se desarrollen no serán suficientes para recomponer los atrasos del invierno, pero el avance de la primavera siempre está acompañado por una mayor inestabilidad que promueve la presencia de tormentas.
Por el momento, una potencial Niña es irrelevante frente a mecanismos de escala regional que muestran poca eficiencia de la circulación noreste para transportar masas de aire con buena carga de humedad hacia la región pampeana.
Con el avance de octubre seguramente las lluvias experimentarán una mejoría, pero los acumulados se mantendrán por debajo de los valores normales de no mediar un cambio que favorezca la persistente circulación de masas de aire húmedo hacia el centro del país posibilitando mejoras pluviales generalizadas.