Indicadores Climáticos


Lo que viene, el pronóstico para la semana próxima en la región núcleo

Semana muy inestable

El desarrollo de lluvias y tormentas será de variada intensidad. Habrá registros muy importantes.

La semana de análisis estará bien diferenciada en dos partes. La primera será muy activa en cuanto a las precipitaciones con desarrollos fuertes a muy fuertes entre el jueves y hasta el sábado inclusive. En La segunda parte habrá condiciones estables y descenso de la temperatura.

La presencia de humedad y elevadas temperaturas, combinada con el avance de un sistema frontal frío, comenzarán a provocar lluvias y tormentas de variada intensidad sobre toda la región GEA entre los días jueves, viernes y sábado. Si bien habrá algunas pausas temporarias, los fenómenos serán realmente importantes en toda la región, con acumulados muy destacados. A partir del domingo la situación será más calma, con tiempo estable y el ingreso de aire más frío y seco a la porción central del país.

En los próximos tres días no habrá cambios relevantes en las temperaturas debido a la presencia de las lluvias. Luego los registros caerán de manera significativa por el ingreso de aire frío y seco a la zona GEA, provocando un importante descenso de las marcas térmicas a nivel generalizado. Los valores más bajos se observarían entre el lunes y martes y luego volverían a aumentar progresivamente.

La circulación del viento se mantendrá del sector norte la primera parte de la semana, aportando humedad y temperaturas relativamente elevadas. Durante la segunda parte cambiará al sector sur, fomentando el descenso térmico en toda la zona GEA.

La nubosidad presentará una muy clara la diferencia entre el jueves y el sábado respecto a lo que se observará entre el domingo y miércoles próximo. Inicialmente, el cielo estará totalmente cubierto, acompañando las importantes precipitaciones, y luego mayormente despejado.

La humedad en las capas bajas de la atmósfera también será muy elevada en el inicio del periodo de pronóstico potenciando las condiciones de inestabilidad y el desarrollo de las lluvias y tormentas. A partir de la segunda mitad presentará condiciones más secas y estables en toda la zona GEA.

 

Lo que pasó con el clima en la última semana en la región núcleo

Lluvias moderadas en el este

Los registros de las estaciones variaron entre 0 y 38 mm. Toda la franja oeste de GEA prácticamente no recibió precipitaciones

La semana comprendida entre el jueves 18 y el miércoles 24 de marzo las lluvias fueron moderadas y acotadas sobre el margen este de la región GEA, alcanzando registros de más de 30 mm. El valor más destacado fue el medido en la localidad de Irigoyen, provincia de Santa Fe, donde se registraron 36,8 mm semanales.

Las temperaturas presentaron registros levemente superiores a los parámetros normales para la época del año, con valores máximos que quedaron en el rango entre 27ºC y 30ºC. El dato más destacado fue el de la localidad de Idiazabal, en la provincia de Córdoba, con un registro de 31,5ºC. Las mínimas, se presentaron por debajo de lo normal para la época del año, e inferiores a las de la semana pasada, con marcas entre 7 y 10ºC. El valor más bajo registrado fue en la localidad de Junín, Buenos Aires, con 5,8ºC.

Se puede observar que las condiciones se mantienen moderadas en toda la región. En la mayor parte de GEA se han disipado los síntomas de sequía y ahora las reservas regulares o escasas se presentan mayormente en el norte de Buenos Aires y sur de Santa Fe. La provincia de Córdoba y el centro de Santa Fe mantienen características entre adecuadas y óptimas.

Para los próximos quince días, se necesitarían lluvias con acumulados en el orden de los 80 mm en Buenos Aires y parte de Santa Fe. Mientras que, sobre el centro-este de Córdoba, las lluvias necesarias para mantener las condiciones en un buen nivel hídrico serían inferiores a los 20 mm. Cabe destacar que los pronósticos de corto plazo están mostrando caudales de lluvia incluso superiores a los necesarios para los próximos días.

 

Extensión GEA: O de Córdoba, N de Santa Fe, Santiago del E. y Chaco

“El sistema frontal de lluvias está siendo muy favorecido por el actual desplazamiento hacia el este del centro de alta presión”

Durante el último fin de semana, en coincidencia con el inicio del otoño, el pasaje de un sistema frontal generó condiciones muy favorables para el desarrollo de sistemas precipitantes. El despliegue de las lluvias prácticamente dividió en diagonal el territorio nacional, trazando una línea imaginaria desde Balcarce, en Buenos Aires, hasta el extremo oeste de Salta. En esta oportunidad, las zonas del este recibieron el mayor caudal de agua. Se invirtió así, una situación que hasta el momento había favorecido sistemáticamente la franja oeste del país.

Las lluvias no fueron demasiado generosas sobre la zona núcleo, principalmente en el oeste. Los acumulados presentaron un gradiente en ascenso a medida que nos desplazamos al noreste, con un marcado epicentro sobre el centro de Santa Fe. Los registros aumentan de manera significativa hacia el territorio entrerriano, la mesopotamia y el NEA donde se concentró la actividad más importante.

Las principales zonas productivas de Buenos Aires, Córdoba y La Pampa quedaron prácticamente excluidas de este evento. Más allá de que hubo algunos registros muy débiles y aislados que no produjeron modificaciones de importancia en el estado de los perfiles.

El mapa de disponibilidad de agua en el suelo muestra claramente como han incidido sobre las condiciones hídricas las lluvias recibidas durante el cambio de estación.

Las reservas óptimas o adecuadas copian perfectamente la distribución de las zonas donde las lluvias alcanzaron mayor volumen. Las características de escasez, o incluso principio de sequía, se mantienen muy presentes sobre el norte de Buenos Aires y oeste del Chaco. 

La presencia de dos sistemas frontales consecutivos en el lapso de diez días, que provocó lluvias significativas y bastante generalizadas, es un indicio de que la frecuencia de los sistemas que logran avanzar eficientemente hasta el noreste del país se está modificando. Este comportamiento es típico de la transición estacional y seguramente se irá afianzando con el avance del otoño, permitiendo que las precipitaciones comienzan a ganar frecuencia.

El cambio es ampliamente favorable; un cierre húmedo del mes de marzo, que puede tener continuidad durante abril, dejaría en el pasado los efectos negativos de tantas semanas secas y perfiles al borde de la sequía en gran parte de la región pampeana.

Una recomposición atmosférica de este tipo podría generar complicaciones transitorias para el avance de cosecha de granos gruesos, pero mejoraría considerablemente las perspectivas para la fina.

El sistema frontal de lluvias está siendo muy favorecido por el actual desplazamiento hacia el este del centro de alta presión. Según los modelos, el volumen y desarrollo de las precipitaciones serían similares a las del último fin de semana.