SUBZONAS Y RED DE ESTACIONES METEOROLÓGICAS GEA

SUBZONA I

“Las reservas (hídricas) para el trigo están casi al máximo”, comentan en las cercanías a El Trébol. Se sumó otra lluvia de 79 mm, estarían faltando 80 mm más hasta la siembra. Pero aún con buenas reservas hídricas estiman que el área de trigo se mantendría constante respecto al año pasado. “Los factores que podrían limitar la siembra son el ambiente y si hay un derrumbe del precio del cereal a cosecha”, explican. Observan que la demanda de insumos para trigo no aumentó respecto al año pasado y planean mantener los mismos niveles de fertilización que la campaña previa. La cosecha de soja temprana terminó con 40 qq/ha de promedio, 5 puntos por debajo de la media de los últimos 5 años. Los mínimos estuvieron en 30 y los máximos en 55 qq/ha. La soja de segunda presenta un avance del 70% con rindes que se estabilizan en 35 qq/ha (2 puntos por encima del promedio de la zona), mínimos de 20 qq/ha y máximos de 40 qq/ha. Al maíz le falta un 5% del área para termina su colecta. Los rindes medios se ubican en 110 qq/ha, superando en 10 qq los rindes históricos. Hay pisos de 80 qq/ha y máximos de 140 qq/ha.  

En estos días no se registraron lluvias en Carlos Pellegrini. Los ingenieros indican que queda muy poco por cosechar, por lo que si habría una lluvia en estos momentos no generaría problemas, salvo en algún bajo pronunciado. Finalizo la cosecha de soja de primera con un rinde medio de 42 qq/ha, 3 quintales menos que el promedio de los últimos 3 años. Los picos alcanzaron los 60 qq/ha y los mínimos estuvieron en 35 qq/ha. Queda un puñado de lotes de segunda por trillar. El rinde va de 30 a 45 qq/ha, con un promedio de 38 qq/ha. Resta por cosechar un 20% del  maíz temprano. El rinde promedio iguala al de los últimos 3 años, 110 qq/ha. Los resultados máximos estuvieron en 130 qq/ha.

Finalizó la cosecha de soja en los alrededores de Cañada Rosquin. En 45 días arranca la de los maíces tardíos y de segunda. En cuanto a la campaña triguera, los ingenieros comentan que van a mantener el porcentaje de rotación que se venía haciendo, por lo que la superficie sembrada con el cereal será similar a la del año pasado. La humedad del suelo es buena para la siembra. En cuanto a la fertilización, los técnicos advierten que el aumento de los precios de los fertilizantes y el temor por la amenaza de nuevas medidas, desalientan la incorporación de más tecnología al cultivo.

Los ingenieros de Cañada de Gómez señalan que los suelos tienen buena reserva de agua para la siembra de trigo. Si llueve más, el área triguera podría aumentar un 10% más respecto a la campaña anterior. Los técnicos señalan que más allá de la suba de los precios de los insumos, la demanda para la campaña fina se mantiene como el año pasado en estos días. “Hace dos campañas que hacemos la mejor fertilización que podemos: aplicación de urea antes de la siembra del trigo, con el agregado de un arrancador”, relatan. Terminó la cosecha de soja. La de primera promedio 37 qq/ha, con picos de 43 qq/ha. La de segunda finalizo con un rinde promedio de 39 qq/ha, con picos de 46 qq/ha. 

SUBZONA II

En Bigand, de lo primero que se habla al hablar de trigo es del agua disponible en los suelos: “considerando que en el transcurso del año han llovido 460 mm aproximadamente y entre enero y febrero cayeron 260 mm, los 200 mm restante sería agua al suelo. Por más que haya una buena infiltración, tenemos buena humedad en el primer metro de suelo. Pero el segundo metro, estaría con bajo valor de agua útil. Deberíamos tener más lluvias durante el ciclo para asegurar una buena producción”.  Tambien explican que al comparar con el año pasado, “a esta fecha estamos mejor. Tenemos buena humedad para sembrar. Solo faltaría unos 100 mm más para asegurar unos 25 qq/ha de trigo de base”. Por todo esto la intención de siembra triguera se mantendría la superficie, o por el momento podría tender a la baja: “la sequía del año pasado y la incertidumbre que siente el productor por futuras decisiones políticas juegan en contra”. Con relación a Insumos, “hay una gran demanda por híbridos de maíz y sorgo granífero, sumado a la compra de fertilizantes, específicamente arrancador y fuentes nitrogenadas (urea o SolMix). Pero ir por planteos de mayor tecnología en cuanto a la fertilización, por el momento no se ve”, explican. En cuanto a la cosecha la de primera está casi terminada, con rindes que van de 17 a 52 qq/ha y una media de 35 qq/ha. En la de segunda solo falta un 10% y el promedio es de 28 quintales. El maíz temprano, tambien con un 90% de avance, promedia 95 qq/ha.

En Bombal tambien el agua en los perfiles es el tema principal al plantear el panorama de la siembra triguera. “Las reservas están justas, casi adecuadas. Faltaría para una situación óptima 50 mm más mediados de mayo y 50 más en junio”, explican los técnicos. Agregan que “no creo que se esté pensando en fertilizar más. Salvo aquel que tenga resto y lo invierta en fertilizantes. Más producís, más te quitan de todos lados; no hay entusiasmo en los productores”, comentan en el área. En cuanto a la cosecha falta muy poco para terminar: “las últimas lluvias van a retrasar muy poco tiempo la trilla, si es que no se retoma inmediatamente lo que queda por hacer”.

"Las reservas hídricas para la siembra de trigo están al 50 y al 70%, según la zona", indican los ingenieros de San Gregorio. Están faltando unos 50 a 100 mm para llegar a capacidad de campo. El área se siembra será similar a la del año pasado. Sin embrago, uno de los factores que puede limitar la siembra es el temor por aumento de retenciones. Los profesionales indican que se piensa aplicar una mejor fertilización este año, en la medida que se afiance la tendencia de año neutro a niño. La soja de primera finalizó su cosecha con un rinde promedio de 37 qq/ha. Resta un 40% del área de la de segunda por trillar. El rinde medio es de 30 qq/ha. La cosecha del maíz temprano lleva un avance del 30% con un rinde que promedia 90 qq/ha.

SUBZONA III

Los ingenieros de los alrededores de Pergamino señalan que este año se mantendrá la superficie con trigo será similar a la del año pasado, conservándose el alto nivel de siembra que tiene desde hace varios años. Faltarían unos 50 mm para cargar el perfil. "el temor es por el incremento en el precio de los fertilizantes y a una posible intervención de los mercados", comentan los técnicos. La trilla de soja de primera llega a su final. "Se hizo larga la cosecha; el año pasado en esta fecha ya se había terminado en forma completa", dicen.  Los rindes estuvieron entre 18 a 54 qq/ha. En Pergamino el promedio fue de 28 qq/ha, en Colon y Rojas, 31 qq/ha. Queda un 30% de la soja de segunda por cosechar. El rinde promedia 18 qq/ha, 10 quintales menos que la media de los últimos 3 años. Se lleva cosechado el 75% del maíz temprano. El rinde promedia 90 qq/ha, 15 puntos por debajo del promedio de las últimas campañas. 

SUBZONA IV

“En el mejor de los casos estamos en el 50% de la capacidad de campo. Faltarían al menos 60 mm para no depender de las lluvias en agosto que rara vez aparecen”, comentan en General Pinto sus ingenieros a la hora de hablar del trigo. El noroeste bonaerense es una de las zonas con menores reservas en la región pampeana y aunque hay entusiasmo para sembrar trigo, este año hay una limitante ambiental importante, explican en el área. “Se sale de una gruesa seca que deja una gran deuda de agua y sigue notándose. Las últimos dos lluvias que llegaron a la región pampeana pasaron de largo por este barrio”. A grandes rasgos analizan que si bien los fertilizantes subieron un 40% en dólares, el trigo también subió. “La relación insumo producto es favorable este año, incluso pese a las subas de insumos”, comentan. “También hay un reajuste de alquileres que puede complicar las decisiones en campos arrendados, pero por otro lado el trigo anduvo bien en esta zona y se nota la diferencia a la hora de financiar la gruesa cuando deja beneficios”. En conclusión, es la limitante ambiental la podría dejar una menor área triguera que la sembrada el año pasado. En cuanto a la cosecha de soja aún hay un 40% pendiente. Hay zonas que los rindes son muy malos como en el caso de Ameghino con sojas de 10 qq/ha. En otras, si bien hay mucha diferencias entre lotes, hay una media que tendería a los 32 qq/ha. En sojas de segunda el promedio es de 18 qq/ha. En Maíz está casi todo en pie. En el área estiman rindes en alrededor de los 78 qq/ha.

SUBZONA V

“Las reservas de agua para la siembra son óptimas y los perfiles del suelo están cargados en su totalidad”, comentan los ingenieros de Monte Maíz. Desde fines de enero por la zona de Laborde, Isla Verde, Escalante y Monte Maíz, las tormentas llegaron con agua y granizo. Durante el mes de marzo y abril también llovió para alcanzar la capacidad de campo. “Con esta recarga de humedad creemos que el área de trigo va incrementarse bastante respecto al año pasado. Hay que tener en cuenta que en la campaña previa no pudimos seguir sembrando a partir de 6-7 de junio por escases hídrica”, destacan. No ven limitantes en general aunque se mencionan la disponibilidad de semilla a la siembra y la humedad superficial para los trigos de ciclo corto como posibles inconvenientes. Se sigue apostando a la rotación con planteos de alta tecnología para trigo. Sobre rastrojo de maíz aplican niveles de fertilización de 220 kg de N más nitrógeno del suelo y en planteos sobre rastrojo de soja aplican 180-200 kg de N más nitrógeno del suelo. La rotación tiende a favorecer al maíz temprano sobre la soja de primera. Plantean rotaciones de 3 patas o del 33% para cada cultivo. La cosecha de maíz temprano finalizó con excelentes resultados: 120-130 qq/ha de piso y 150 qq/ha de promedio. La soja de primera en cambio quedó en 40 qq/ha, es decir 6% por debajo que su rinde histórico. “Cada vez se complica más alcanzar el rinde objetivo”. La soja de segunda se destacó con 35 a 36 qq/ha ya que fue sembrada en los mejores lotes donde se pudo sembrar trigo. El maíz tardío y de segunda se encuentra en buen estado pero aún húmedos para iniciar la colecta.