Detalle por Subzonas

Cultivos 2007/2008


SUBZONA GEA I

Con la campaña terminada la próxima tarea es, a pesar del ambiente de incertidumbre, pensar cómo posicionarse para sostener el negocio y planear la actual campaña. Estamos en tiempo de planificación y el cultivo de trigo empieza recibir algunas definiciones con variadas señales. Mucho se depende de las decisiones políticas, de lograr percibir realmente un precio lleno, del nivel de precio de los insumos, que han subido fuertemente, y de pronósticos climáticos no favorables, con falta de acumulación de humedad en el perfil.

En el área de influencia de Carlos Pellegrini, la superficie de trigo a sembrar es inferior a la del año pasado. De hecho, en la única localidad favorecida en la semana con 17 mm, la intencionalidad de implantación del cereal es de una fuerte caída. En cuanto a la tecnología a aplicar, una variable de ajuste será la fertilización fosfatada. Se trata de adecuar, mediante análisis químicos de suelos, las condiciones de cada lote para hacer una precisa evaluación y ajustar con su costo marginal el uso del fósforo. Su costo “prohibitivo” para encarar la presente campaña, como muchos señalan, maximizaría o minimizaría su utilización. La intención de siembra de maíz, hasta el momento, también es inferior a la del año pasado.

No muy lejos, acercándonos a El Trébol, hay unas últimas acotaciones con el cierre de la cosecha de soja. El balance de la campaña es muy positivo, observándose rendimientos promedio elevados con respecto a lo esperado. Los rindes se van reajustando en la medida que la mercadería ingresa a almacenaje y se ven mejores números. En soja de primera se definieron 38qq/ha y en soja de segunda en 32 qq/ha. Para el caso de maíz, prácticamente quedaron en 90 qq/ha. La precampaña de maíz 2008/09 avanza tibiamente, con inferior demanda a la del año pasado. No compite la soja de primera con el trigo ya que si hay precio pleno se va a sembrar el cereal con tecnología y se mantendría el área. Está difícil conseguir gasoil pero no resulta de necesidad ahora que culminó la cosecha.

En el área de Villa Eloísa se van manifestando las intenciones de siembra de trigo, con porcentajes notoriamente bajos (se manifiesta 20% en algunos casos puntuales), siempre tomando a la campaña predecesora como referencia.

SUBZONA GEA II

Se repasan los números finales de las inmediaciones de Bigand, a punto de completar el 100% del área cosechada de soja, como la de maíz y sorgo. Los rindes fueron buenos en maíz (promedio de 95 qq/Ha) y muy buenos en soja de primera (promedio de 42 qq/Ha). En la soja de segunda los rindes se “pincharon” a pesar de tener buen desarrollo de planta y buen aspecto general en los cultivos. En promedio los rindes no llegaron a los 30 qq/Ha. La superficie de trigo disminuiría significativamente. La explicación es por la falta de certidumbre respecto de los precios.

En las inmediaciones de San José de la Esquina, la seca y la incertidumbre siguen manteniendo en una zona de indefinición a muchos lotes que potencialmente podrían destinarse al trigo. Aunque es notorio este clima, el deseo por lluvia para materializar la siembra es fuerte. A pesar de los costos, muchos están teniendo en cuenta las productividades que se alcanzaron en la zona en la campaña 2007/08.

Hacia el sur del departamento, en los alrededores de Rufino, el panorama permanece más oscuro sobre el cereal y las definiciones se siguen postergando.

SUBZONA GEA III

En la zona de Pergamino, la interpretación preliminar es que no habría mermas de superficie o que el ajuste podría sería muy leve. Hay que considerar que la referencia se hace sobre la anterior campaña, cuando ya hubo un ajuste negativo en área sembrada. El doble cultivo de trigo / soja se reparte la carga para soportar el costo del fertilizantes por hectárea, que es propio de la estructura de gastos que afecta al cereal. Se van observando signos de debilidad hacia la próxima campaña de maíz. De no mediar algún cambio, el impacto del fuerte incremento de la urea le haría perder terreno frente a la soja próxima.

En el área de San Antonio de Areco, las intenciones de siembra de los cereales, tanto trigo como maíz, penden de lo que surja de la puja sectorial con el gobierno. Hay un cierto desánimo por la gran suba de precios de los fertilizantes y el glifosato, sumándose ahora la falta de gasoil. Sin embargo, el factor que más preocupa para el trigo es la falta de lluvias. Hace un mes y medio que no llueve; el perfil del suelo está prácticamente sin nada de humedad.

SUBZONA GEA IV

El grueso de la cosecha está terminado, resta levantar un 10% de la superficie de maíz. La falta de agua sigue pendiente.

Hacia el noreste, en el área de General Arenales y Ascensión la humedad escasea sólo a nivel superficial; los técnicos evalúan que con unos 20 a 30 milímetros podría iniciarse la campaña de trigo, pero comentaban que “está todo muy frío, no se está comercializando mucha semilla hasta el momento”

En el ámbito de General Pinto y Villa Francia, el 80% de la siembra se hace antes del 15 de junio y está aumentando la necesidad de lluvias para la implantación: “20 o 25 mm no son suficientes”. Esta sequía se agrava a medida que se avanza hacia  Florentino Ameghino, y es aún más inclemente llegando a Villegas.

SUBZONA GEA V

A medida que pasan los días aumenta la preocupación por las reservas de humedad del suelo. Es el factor de mayor peso a la hora de evaluar la superficie sembrada. Las lluvias de invierno en una zona tan continental son escasas, lo que hace que la producción de trigo sea muy dependiente del contenido de agua, no sólo en los primeros centímetros, sino en el todo perfil. Luego, vienen las evaluaciones de costos y precios futuros, y la profundización del conflicto agropecuario, lo que genera gran incertidumbre y “enfría” sensiblemente la intención de siembra. En el área de Marcos Juárez, en las proximidades de Canals y en otras tantas, se habla de drásticas reducciones de superficie. Como contracara, hay componentes que tienden a sostener el área sembrada. Los productores cuentan con la semilla, y es difícil de imaginar un cese de la actividad económica. Finalmente, la rotación de cultivos es otro  factor de peso. Pongamos como ejemplo una rotación frecuente: año1: maíz; año2: soja, año3: trigo-soja. Alterar esto por sucesos coyunturales, o sea, “romper la rotación”, es romper con un enfoque productivo sustentable a largo plazo.