
Entre el consumo animal, la molienda seca y húmeda, y el sector de la bioeconomía, el consumo de maíz podría incrementarse.
Entre el consumo animal, la molienda seca y húmeda, y el sector de la bioeconomía, el consumo de maíz podría incrementarse.
La cosecha se estimó en 4,5 Mt, un 20% menos que en 2021/22. Comparado con el 50% de caída interanual en el trigo, la retracción resulta menos drástica. Desde lo comercial, 2023 inició con un buen ritmo de ventas externas para la cebada en grano.
Las ventas de los productores de soja de la nueva cosecha alcanzan el punto mínimo en 20 años, pero con gran proporción de negocios a fijar. En maíz ocurre algo similar, con la comercialización interna mostrando el menor volumen desde la 2015/16.
El segundo complejo exportador de la economía argentina cierra su segundo mejor año en dólares exportados, con bajas en cantidades pero mejores precios. Más importaciones de soja de Brasil, aunque todavía no se observan elevados volúmenes.
Se despacharon 3,5 millones de kilos en el primer bimestre del año, por un valor de US$ 8,77 millones. Este importe es 14% inferior a igual período de 2022 y el menor ingreso de divisas en 10 años.
El fuerte retraso tanto en el precio de la hacienda como en el de la carne en los últimos meses tornaba sumamente previsible una corrección de magnitud, especialmente en un contexto inflacionario y agravado por la seca.