Las iniciales expectativas en cuanto a repetir o incrementar la cobertura de superficie con maíz cambiaron drásticamente a pocas semanas de comenzar las labores de siembra. Los márgenes del maíz están muy golpeados por el nivel de precios y la alta carga de inversión implícita. Todo indica que aumentará decididamente el área de soja. Fundamental, que llueva de aquí a 20 días; de lo contrario, el trigo verá mermar sus rindes.

Subyace la idea de que se detuvo el movimiento de inversión en el sector, que se venía viendo en los últimos cinco años, ya que los números no dan tan favorablemente para la próxima campaña. En el maíz eso ya empieza a hacerse ostensible. La continuidad de la seca tampoco ayuda, por el mayor riesgo de comenzar el cultivo del maíz con bajas reservas de los perfiles. Está estancado el planeamiento de la cosecha gruesa, mientras que en poco tiempo más, a fines de agosto, se abre la ventana de siembra en el norte de la región núcleo, coincidente con la de GEA.

El trigo sigue manteniendo su condición pese a la falta de recarga de lluvias. Sin embargo, se necesita que llueva en los próximos 20 días ya que a partir de entonces el trigo empezará a encañar y ahí sí es fundamental el agua. Las intensas heladas no han dejado daños. De hecho, lo rustificaron y con las condiciones de frío se observa una mejoría en el desarrollo de macollos, sobre todo hacia Buenos Aires donde se mantiene las mejores reservas de los perfiles.

Lluvias necesarias para los próximos 15 días: precipitaciones que deberían producirse para que el cultivo cubra sus necesidades hídricas. Seleccione la imagen para ampliarla