Commodities

El USDA dio impulso a la soja

Emilce Terré

Finalmente se conocieron las estimaciones de oferta y demanda estadounidenses y mundiales del USDA, que el mercado aguardaba con impaciencia luego que en octubre el reporte fuese cancelado por el cierre parcial de la administración pública estadounidense.

El informe resultó claramente alcista para la soja, ya que el organismo ha reportado previsiones de stocks al final de la campaña 2013/14 por debajo de lo que esperaba el mercado, tanto para Estados Unidos como a nivel global.

Esta suba externa sustentó el movimiento alcista en el mercado local al cierre de la semana. Los futuros de soja en condiciones fábrica de ROFEX con entrega en el mes de noviembre ajustaron hoy a u$s 348,0/ton (equivalente a $ 2.074/ton al tipo de cambio de garantía del mercado), con una suba del 2% respecto al viernes anterior.

Mientras tanto, la Cámara Arbitral estableció un precio Pizarra para las operaciones del día jueves de $ 2.039/ton, con una suba de $14/ton por encima de la semana anterior. Esta suba de las cotizaciones facilitó un mayor volumen de negocios en la plaza, aunque un alto porcentaje de las mismas se hicieron bajo condiciones “a fijar”, intentando limitar el riesgo cambiario asociado.

De cualquier modo, los márgenes de la industria continúan ajustados limitando el potencial alcista de la oleaginosa. Como referencia, al mismo día 07 de noviembre, el FAS teórico de la industria (que representa su capacidad teórica de pago) arrojaba un valor promedio de $ 2.011/ton.

En relación a lo anterior, la mejora en los precios de la harina de soja trae algo de alivio al mercado. En Chicago, este subproducto ajustó el viernes a u$s 465,50/ton, con una mejora del 6,9% respecto a la semana anterior ante el optimismo con el que se mira la demanda externa del subproducto para Norteamérica. El precio del aceite de soja, sin embargo, no acompañó este movimiento ya que luego que la FDA norteamericana hiciese pública su intención de prohibir las grasas trans para el consumo humano el precio cayó, para cerrar la semana a u$s 887,13/ton, un 3,2% por debajo del viernes anterior. Como referencia, la suba semanal de los futuros de poroto de soja en CME Group alcanzó el 3,2% hasta los u$s 479,88/ton, en todos los casos para la posición más cercana.

Respecto de la comercialización de la soja nueva, los negocios continúan avanzando muy lentamente, en medio de un panorama bastante incierto en lo que respecta tanto a la producción como al entorno comercial. El mes de octubre cerró con menos de 2 millones de toneladas compradas, según los datos reportados por el Ministerio de Agricultura, cuando el promedio de las últimas cinco campañas supera los 5 millones. Además, solo la cuarta parte de estos negocios se realizaron con precios en firme cuando generalmente dicho porcentaje ha superado el 50%, tal como puede verse en los Indicadores Comerciales adjuntos.

Este mismo retraso en las ventas se observa en otros de los principales países productores del mundo, como es el caso de Brasil. Para el vecino país, mientras que la información oficial difundida por la Conab   en la semana ha elevado la estimación de producción para la campaña 2013/14 a 90,2 millones de toneladas, el informe que dio a conocer hoy el USDA mantuvo su previsión en 88 millones de toneladas. Con ello, Brasil no lograría este año superar a Estados Unidos como principal productor mundial de soja ya que Norteamérica obtendría 88,7 millones de toneladas.

Además del aumento en la producción prevista para EEUU en la campaña 2013/14, el Departamento de Agricultura subió fuertemente las estimaciones de demanda tanto de exportación como internas por las mayores ventas de harina. Como resultado, el stock final norteamericano aumentó sólo 0,5 millones de toneladas, cuando el mercado descontaba aún mayor holgura impulsando los precios.

A nivel global, los cambios en la producción prevista por el USDA se circunscribieron mayormente al hemisferio norte, estimando una mayor oferta. Para Sudamérica no se modificaron las estimaciones de producción, manteniéndose la proyección de 53,5 millones de toneladas para Argentina, pero sí para el balance externo. Las exportaciones previstas para nuestro país bajaron de 12,7 a 9,7 millones de toneladas, mientras que las brasileñas subieron de 42,5 a 44 millones de toneladas. Sin embargo, la revisión al alza de las previsiones de demanda global de poroto de soja y sus derivados llevaron al organismo a acotar la previsión de stocks al final de la campaña a 70,2 millones de toneladas, desde las 71,5 millones previstas en septiembre. Esto sorprendió al mercado -que de hecho esperaba un incremento en los inventarios finales- reforzando el efecto alcista sobre los precios

En concreto, del informe del USDA se desprende la idea que el balance de oferta y demanda tiene mayor holgura relativa para el maíz que para la soja, especialmente en Estados Unidos. Con ello, el movimiento de los precios nuevamente ha favorecido proporcionalmente más a la oleaginosa: mientras que la soja hoy vale un 11,3% menos que hace un año atrás, el maíz ha perdido el 41,8% de su valor durante el mismo período de tiempo.

En Argentina, mientras terminan de definirse los planes de siembra entre quienes decidan hacer soja o maíz de segunda, este movimiento de los precios no colabora en impulsar la producción de maíz, reforzando la idea de un notable aumento en el área de implantación de la oleaginosa. Hoy en día, ya se está pensando que ésta ganaría al menos un millón de hectáreas adicionales.   Por otro lado, las lluvias que recibió la región en la última semana permitieron avanzar con las labores en los campos con lo que el 30% del área de intención en la zona núcleo ya habría sido cubierta. Ello, sin embargo, representa un retraso importante respecto al 60% promedio que sería normal en la región para esta época del año. Mientras se aguardan nuevas lluvias este fin de semana, se espera que pueda recuperarse el ritmo de siembras para no comprometer el potencial de rindes.