Commodities

Tenso panorama en el mercado sojero

Emilce Terré

Hasta el viernes, los precios de la oleaginosa evolucionaron relativamente estables mientras se debaten entre compradores a los que se le agota el margen para mejorar sus ofrecimientos y productores que necesitan cubrir los mayores costos asociados a la nueva campaña. Sin embargo, al cierre de la semana los precios estimados por la Cámara Arbitral de Cereales de Rosario se retrajeron por los menores ofrecimientos de la demanda, no así en el mercado externo de referencia que mostraron una fuerte suba.

Del lado de la oferta, la combinación de menores precios de la soja respecto al año anterior y aumento de los costos de producción ha dado como resultado un margen bruto en extremo ajustado. En este contexto, el mercado climático redobla su injerencia ya que si a lo anterior llega a sumarse un menor rinde potencial producto de condiciones de humedad deficientes o excesivas, será muy difícil -al menos para gran parte de los productores- escapar del quebranto.

Si bien en las últimas semanas volvieron a registrarse lluvias en gran parte de la zona núcleo permitiendo impulsar las siembras, éstas aún resultan insuficientes en regiones como el sur de Santa Fe y el sudoeste de Córdoba y, en combinación con las altas temperaturas, ha mermado la reserva hídrica de los suelos. Allí, según estimaciones de GEA, se necesitan entre 250 y 300 mm antes de fin de año para optimizar las condiciones de las tierras de cara a la estación estival.

Del lado de la demanda, la capacidad de pago se encuentra muy comprometida en los actuales niveles de precios, resultándoles difícil convalidar mejoras en las ofertas. Según algunos trascendidos del mercado, el volumen procesado en las fábricas de la región durante el mes de noviembre habría sido cercano al 50% de la capacidad instalada, lo cual no sólo pone en jaque a la industria sino también a toda la cadena de intermediarios que dependen de la fluidez comercial del mercado.

Respecto a los valores, para las operaciones realizadas el día viernes la Cámara Arbitral de Cereales fijó un valor estimativo de $ 2.080/ton, con una variación de $ (-33)/ton respecto al día anterior, y de $ (-20)/ton en relación al viernes pasado. Cabe destacar que el promedio ponderado que se utiliza para el cálculo no contó el día viernes con la referencia de los Mercados a Término ya que la posición noviembre se encontraba vencida. Éstos se reintegrarán al cálculo recién a partir del primer día hábil de diciembre. En el Mercado a Término de Rosario, mientras tanto, la posición diciembre de soja en condiciones fábrica cayó u$s 2,9 en la semana, para ajustar este viernes en un nivel equivalente a $ 2.111,50/ton, convertidos al tipo de cambio de garantía del mercado.

Finalmente, la posición más cercana de los futuros de soja en el Mercado de Chicago cerró la semana con una suba del 3% para ajustar el viernes a u$s 484,84/ton, sostenida por la firmeza de la demanda externa y la notable suba de los precios de la harina de soja que se revalorizó un 4,2%, mientras que el precio del aceite de soja aumentó un 1,7%.

El día jueves el USDA reportó exportaciones semanales estadounidenses por 1,4 millones de toneladas de soja, muy por encima de lo que descontaba el promedio de los operadores. Sumado a ello, se sucedieron en la semana los reportes de exportaciones privadas de soja cuyos operadores están obligados a informarlas en el momento toda vez que superen las 100.000 toneladas.

A la fecha, Estados Unidos ya ha vendido al exterior el 90% del volumen total que el USDA estimó que se exportaría en el año agrícola, por lo que se extiende la expectativa que dicho organismo revise al alza la proyección de demanda externa por poroto estadounidense en su informe mensual de oferta y demanda de diciembre.

En el contexto planteado, el avance de la comercialización en Argentina continúa muy frenado lo cual se evidencia en los Indicadores Comerciales calculados en base a información del Ministerio de Agricultura. El volumen de compras de soja 2012/13 no supera el 80% de la producción estimada, cuando en el promedio de los últimos cinco años a esta altura ya se había negociado alrededor del 90%. Además, apenas el 75% de estas compras se realizaron con valores en firme por lo que aún falta ponerle precio a 11 millones de toneladas, de las 48,3 millones producidas.

En lo que hace a la soja nueva, se vendieron 2,04 millones de toneladas, el menor volumen en casi 10 años. En este segmento también es notable la reticencia a comprometer el valor final de las operaciones, ya que apenas medio millón de toneladas tiene precio en firme. Tal como se mencionó ut supra, los márgenes para el productor se ven en extremo presionados a los valores actuales que cotiza la soja 2013/14. En ROFEX, los futuros cerraron la semana a u$s 298,50/ton para la mercadería en condición fábrica a entregar en mayo de 2014, mientras que en el recinto del Mercado Físico se ofrecían abiertamente u$s 295/ton.

Sin embargo, cabe hacer notar que esta reticencia de los productores a cerrar negocios no es exclusiva de nuestro país. Tanto en Brasil como en Estados Unidos se observa una menor disponibilidad a desprenderse de la mercadería. A la espera que la fortaleza de la demanda habilite en el mediano plazo una recuperación de los precios, Safras & Mercado informó que en nuestro país vecino se cerraron negocios por el 33% de la producción estimada, cuando a esta altura del año pasado dicho porcentaje alcanzaba el 48%.

Mientras tanto, se siguen esperando con ansias nuevas lluvias. En la región núcleo el avance de la siembra alcanza el 73% y se está comenzando con la implantación de la soja de segunda, según estimaciones de GEA. Si bien hay pronosticadas precipitaciones para el domingo éstas deberán ser cuantiosas para potenciar las perspectivas de rinde en la nueva campaña. Por otro lado, continúan sucediéndose en el mercado los rumores acerca de algunas medidas que podrían tomarse frente a la renovación parcial del Gabinete planteada desde el Gobierno Nacional durante esta semana, particularmente en las áreas más sensibles para nuestro sector como son los Ministerios de Agricultura y Economía. En este contexto, se cree que en el corto plazo habrá más señales acerca del rumbo que tomará la política económica y comercial apostando a que se favorezca la producción nacional de granos, área sensible particularmente para el nivel general de precios, el empleo y las cuentas externas argentinas.