Tanto en el plano externo como a nivel local, en la última semana de febrero el maíz recobró el protagonismo que había perdido en los meses recientes. La reactivación de la demanda -en un contexto de oferta retraída- permitió un avance de los precios. Esta situación se presentó cuando en nuestro país la campaña 2011/12 llegaba a su final, coincidente con el cierre de la primera mitad del ciclo en el hemisferio norte.

En Estados Unidos, las subas de Chicago se apoyaron fundamentalmente en la firmeza del mercado físico, destacándose un mejor desempeño de los futuros con entrega cercana que entre los correspondientes a la nueva cosecha. La posición con vencimiento en marzo acumuló ganancias semanales del 4,9%, frente al avance del 2% obtenido por el contrato con delivery en septiembre. De hecho, el spread marzo/mayo trepó por encima de los u$s 0,17/bushel, su valor más elevado de los últimos siete meses. Los productores avizoran un final de campaña con escasos inventarios y se muestran reticentes a vender a valores ubicados por debajo de los u$s 7/bushel, equivalentes a u$s 275/ton.

Como consecuencia de la actual coyuntura del mercado disponible norteamericano, en los primeros días para presentar caratulas que permitan entregar a través de CBOT no hubo vendedores interesados. La alternativa de efectuar el delivery por el mercado a término no luce atractiva para los productores. En algunas regiones del país se pagaron valores cercanos a u$s 290 por tonelada de maíz, sustancialmente mayores a los negociados electrónicamente o a viva voz en Chicago.

Durante los últimos días, la demanda norteamericana recobró vigor tanto para el uso industrial doméstico como para la exportación del grano. Los márgenes en la producción de etanol han vuelto a ser positivos gracias al encarecimiento de los precios internos de los combustibles, situación que expandió la producción diaria promedio de la semana por encima de los 800.000 barriles por primera vez en las últimas siete semanas. En lo que ha transcurrido del año 2013, los precios del etanol han trepado casi un 7%.

En cuanto a la demanda externa, en la última semana el USDA confirmó embarques a Japón y México por volúmenes importantes, aunque también se destacó China como un comprador destacado. En las últimas semanas el gigante asiático reapareció con fuerza en la escena internacional, adquiriendo volúmenes significativos de maíz, trigo y soja.

En la semana que finalizó el 21 de febrero, Estados Unidos acordó exportaciones por 512.577 toneladas, superando en 34% la cifra reportada en la semana precedente y alcanzando el volumen de ventas más elevado de los últimos tres meses. Los operadores de Chicago ubicaban sus expectativas entre 350.000 y 450.000 toneladas, por lo que el volumen informado promovió coberturas que dieron cierto impulso a las cotizaciones.

Hasta el momento, el país del norte comprometió el embarque de algo más de 14 millones de toneladas, volumen equivalente al 64% del nivel proyectado de exportaciones para toda la campaña por el USDA. Cabe destacar que hace 12 meses el saldo acumulado se acercaba a 31 millones de toneladas y acabó representando el 77% de los negocios totales del año comercial. En consecuencia, teniendo en cuenta que los embarques sudamericanos dominarán la escena durante los próximos meses, no habría que descartar que las exportaciones norteamericanas queden por debajo de los 21-22 millones de toneladas y sean superadas por Brasil.

Nuestro país, por su parte, parece haber perdido por algún tiempo el segundo lugar en el ranking mundial de exportadores de maíz, relegado a manos de Brasil. Si bien el USDA proyecta que tanto Brasil como Argentina exportarán 19 millones de toneladas durante la campaña 2012/13, el organismo norteamericano parte de una estimación de cosecha argentina de 27 millones de toneladas, que fuentes locales sostienen que ya no podrá alcanzarse. De hecho, en el Foro del USDA que se realizó durante la semana pasada, el economista jefe del organismo -Joseph W. Glauber- deslizó la posibilidad de que Brasil exporte mayor cantidad de maíz que Estados Unidos durante el período comprendido entre septiembre de 2012 y agosto de este año, algo absolutamente impensado hace sólo una década atrás.

Por su parte, el mercado local fue de menor a mayor y registró un considerable volumen negociado del cereal, tanto para la entrega corta como para las posiciones diferidas hasta mayo y junio. Esta situación motivó el regreso del maíz a la pizarra de Rosario, en vista de las operaciones concertadas a valores ubicados a partir de u$s 180/ton para la descarga en marzo en Gral. Lagos y Punta Alvear. La CAC fijó como precios de referencia $ 905/ton para las operaciones del miércoles y $ 910/ton para el día jueves.

Para quienes buscaban colocar maíz con entrega diferida el precio mejoraba hasta u$s 185 o incluso u$s 187/ton en el rueda del jueves. Estos precios motivaron la aparición del grueso de la oferta que había permanecido retraída durante los últimos meses. A lo largo de la semana se negociaron unas 40.000 toneladas del cereal en el recinto de la Bolsa.

Cabe destacar que el volumen negociado de maíz nuevo supera las 12 millones de toneladas y no le queda mucho margen a los exportadores tradicionales para seguir efectuando compras. Del cupo inicialmente liberado de 15 millones de toneladas, cuatro millones se habían reservado para exportadores nucleados en la CAPECO. En la presente semana se otorgaron Roe Verde por 45.600 toneladas a empresas nucleadas a esta cámara.

Los trabajos de recolección ya han comenzado en la zona norte del país, estimándose una producción de 25,5 millones de toneladas según GEA - Guía Estratégica para el Agro. Esta situación se traduce en un mayor ingreso de mercadería en las terminales portuarias de la zona del gran Rosario. Según datos de Williams Entregas S.A., durante la presente semana llegaron 11.904 camiones con maíz a las plantas de Rosario y zona, redondeando un promedio diario de 2.381 unidades. El promedio de la semana pasada había sido de 1.734 según la misma firma.