Mercado Bovino

Alberto Lugones - Julio Calzada
Hasta marzo, el consumo de carne bovina mantiene una dinámica levemente superior al 2021, en tanto que faena y producción se mantienen apenas por debajo de los registros del año pasado.

 

Indicadores del mercado bovino

La faena de bovinos en marzo fue de 1.134.659 cabezas, implicando una suba del 11,7% respecto al mes previo, mientras que en comparación al mismo mes del 2021 la caída fue del 3,7%. Asimismo, en términos acumulados, el procesamiento de ganado en el 2022 alcanzó los 3,1 millones de bovinos, mientras que en el 2021 era de 3,2 millones, dándose una merma del 1,8%. Luego, la producción en el tercer mes del año fue de 260.000 toneladas superando lo sucedido un mes antes en un 11,6%, mientras que la reducción respecto al mismo mes del año pasado fue del 2,3%. Además, la producción en el primer trimestre del año fue de 716.000 toneladas, apenas un 0,6% por debajo de las 720.000 toneladas del 2021.

La exportación en marzo de 2022 fue de 71.690 toneladas, superando a febrero en 5,7%, mientras que implica un descenso del 4,1% con relación a las exportaciones realizadas en el tercer mes del 2021. Además, los envíos al exterior del primer trimestre de este año se encuentran un 7% por debajo del mismo período del 2021. En cuanto a ingresos FOB, el volumen de divisas que se generaron en marzo por ventas externas se encontró un 7,6% por encima de las exportaciones del mes anterior (US$ 292,6 millones vs US$ 271,9 millones). Al mismo tiempo, se registra una suba del 27,9% realizando la comparación con lo sucedido en marzo de 2021. Por su parte, la ratio exportación/producción tuvo un descenso de 1,53 puntos porcentuales entre marzo y febrero, cerrando el tercer mes del año con un valor del 27,6%, mientras que la caída interanual es de 0,5 puntos. El promedio de la ratio en este primer trimestre del año arroja un resultado del 27%, mientras que en el 2021 este registro era de 29%.

En marzo, el consumo aparente registró una suba respecto a febrero del 14,5%, alcanzando las 189.000 toneladas, mientras que comparando este volumen con el mismo mes del 2021 se puede afirmar que se registró una baja del 1,5%. En términos acumulados, entre enero y marzo de este año se consumieron 522.000 toneladas, mientras que, en el mismo período del 2021 se habían absorbido internamente 514.000 toneladas. Por otra parte, el consumo per cápita anual fue de 47,9 kg/Hab/año, lo cual descendió un 0,2% entre meses, y un 3,4% entre años.

Destacado del mercado bovino 

Podría afirmarse que el 2022 comenzó con un desempeño de faena y producción levemente inferior al 2021, puesto que hasta el tercer mes del año las caídas en estos guarismos en términos acumulados son del 1,8% y del 0,6% respectivamente. Al mismo tiempo, tenemos que las exportaciones disminuyeron un 7% si comparamos los primeros trimestres de cada año. Esta sumatoria de eventos, concluye en que el consumo aparente se encuentre por encima de los registros del año pasado y derivando, en una mejora en la ingesta de carne bovina de los argentinos. No obstante, las subas en estos dos indicadores son del 1,5% y del 0,6% comparando los segmentos enero-marzo de cada año, respectivamente. 

El consumo per cápita medido en kilos por habitante, comenzó el año con un desempeño un 3,9% superior al primer registro del 2021. Sin embargo, la brecha se achicó a un 1% en febrero y en marzo el consumo por habitante se encontró un 2,6% por debajo del mismo mes de año pasado. En otras palabras, si bien el primer bimestre dio señales positivas en cuanto al consumo de carne bovina de los argentinos, aún hay incertidumbre sobre los resultados que se tendrán a lo largo de este año. 

De todas formas, deben tenerse en cuenta dos cuestiones primordiales para realizar las comparativas de consumo en estos años. En un primer lugar, los resultados del año pasado se vieron afectados por las reiteradas variaciones en las normativas gubernamentales. Como puede notarse en el siguiente gráfico, el nivel de absorción de mayo del 2021 rondó los 35 kg/hab, presionando fuertemente a la baja al promedio final del indicador. En segundo lugar, aunque se presentan registros positivos realizando la comparación con el año pasado, el consumo por persona aún encuentra una diferencia considerable con relación a los resultados obtenidos en años anteriores.