Commodities

Retroceden con fuerza los precios del trigo

Guillermo Rossi

El mercado internacional de trigo permanece extremadamente débil, afectado por los buenos resultados de la cosecha 2013/14 en el plano global y condicionado por la caída de los precios del maíz. Si bien la demanda luce firme, los stocks en países exportadores son todavía abundantes y esto limita el potencial de acceso de Estados Unidos a destinos africanos y de Asia central, abastecidos principalmente desde Europa y el Mar Negro. El fortalecimiento del dólar frente al resto de las monedas agrega mayores dificultades.

Aun así, la acción compradora de China es un factor de sostenimiento de las cotizaciones. Si bien los inventarios del gigante asiático continúan siendo relativamente holgados, los problemas de calidad de su última cosecha han limitado considerablemente la oferta disponible para la industria molinera, expandiendo la necesidad de alternar la materia prima local con granos importados. Fuentes locales estiman que unas 20 millones de toneladas –el 16% de la producción- no serían aptas para consumo humano.

Según el Centro Nacional de Información de Granos y Aceites de China (CNGOIC), este ciclo las importaciones treparán hasta 8 millones de toneladas, el volumen más importante en casi dos décadas. Por su parte, el Departamento de Agricultura de Estados Unidos proyecta compras totales por 8,5 millones de toneladas. Hasta el momento el gigante asiático adquirió unas 4,3 millones de toneladas en Estados Unidos, aunque también se han reportado operaciones importantes en Canadá, Francia y Australia.

En el plano mundial, esta situación ha expandido las previsiones iniciales de consumo, aunque cabe advertir que la recomposición de oferta observada en maíz y sus valores muy competitivos limitarán el uso forrajero de trigo en otros países importadores de Asia. En igual sentido operan las buenas cosechas de sorgo y cebada forrajera, sustitutos de gran interés durante la campaña pasada.

En tanto, la siembra de las variedades de invierno continúa progresando en el hemisferio norte, bajo condiciones mayormente favorables. En Estados Unidos el 65% de la superficie implantada se encuentra en condiciones buenas o excelentes, aunque en algunas regiones de Europa y el Mar Negro el otoño lluvioso demoró el avance de las tareas, redundando en pérdidas de área y potencial de rinde. Dado que se esperan incrementos de la superficie global, cabe imaginar que la producción alcanzará un nuevo récord en la campaña 2014/15 de mantenerse las actuales perspectivas climáticas.

No obstante, estas proyecciones lucen algo distantes para nuestro país, en donde recién ahora están comenzando a tomar fuerza los trabajos de recolección en aquellas áreas del centro-norte del país en donde el clima lo permite. A nivel nacional, es probable que la superficie cosechada hasta el momento ronde las 250.000 hectáreas, menos del 10% del total.

El flujo de llegada de mercadería a los puertos ya es una realidad, aunque en cantidades todavía poco significativas. Entre el jueves y viernes llegaron los primeros camiones con trigo a Noble Timbúes y Dreyfus en Gral. Lagos. Dado que la comercialización del cereal muestra un retraso bastante pronunciado respecto del año pasado, los ingresos presentan una fuerte caída interanual. Asimismo, la carga programada de las terminales para las próximas semanas es prácticamente nula.

Los primeros lotes muestran muy buenos parámetros de calidad, lo que es señal de bajos rendimientos. De hecho, en el norte de Santa Fe se han cosechado trigos de 10 qq/ha, mientras que en las provincias del norte hay productividades todavía más bajas. Sin embargo, a medida que la trilla avance hasta la zona núcleo y el sur de Buenos Aires se encontrarán registros más altos, que compensarán parcialmente aquellas pérdidas.

Las primeras estimaciones a nivel nacional apuntan a una recuperación de los rendimientos medios y una mayor superficie cosechada, algo que en 2014 permitirá ampliar la oferta respecto del año previo. No obstante, el stock de partida es extremadamente bajo y los oferentes se muestran reacios a convalidar los nuevos valores de mercado. En el último mes los precios cayeron un 50%.

Durante los últimos días el mercado siguió recibiendo la presión estacional y volvió a operar en baja. Las cifras ofrecidas por la exportación en el recinto de la Bolsa se ubicaron entre u$s 230 y 240 por tonelada para lotes en condiciones Cámara con descarga en diciembre, aunque contaban con margen de mejora en operaciones canalizadas a través de Rofex. Aun así, en la plataforma electrónica los futuros con entrega en diciembre exhibieron una tendencia bajista luego de alcanzar u$s 255/ton el día lunes.

Los exportadores presentan problemas de competitividad debido a las caídas externas y los valores que maneja la industria en la plaza local. Al parecer, la necesidad de recuperar stock le brindará a los molinos el predominio del mercado durante los primeros tramos de la campaña. En Rosario, estos participantes pagaron a principios de semana hasta u$s 250/ton por trigo artículo 12 y PH 76, aunque luego redujeron su disposición a pagar. Al parecer, los compradores esperan que el flujo de oferta de las próximas semanas deprima todavía más las cotizaciones.

El último dato oficial del Ministerio de Agricultura estimó que en septiembre los molinos procesaron 361.250 toneladas de trigo pan y otras 1.472 toneladas se emplearon para alimento balanceado. Se trató del volumen más bajo desde febrero de 2002, cuando la economía argentina atravesaba una severa crisis. Asimismo, el número se encontró un 12% por debajo del mes precedente y fue un 23% menor al del mismo período del año 2012. Cabe esperar que en octubre la actividad haya sido todavía más baja. El mercado local está próximo a recuperar fluidez, apoyado en el crecimiento de la oferta disponible. Dado que el 90% de la nueva cosecha no se ha vendido ni tiene precio fijado, queda muchísimo margen aún para que la oferta y la demanda encuentren nuevos niveles de equilibrio, dejando atrás los máximos del ciclo 2012/13.