Commodities

El precio del trigo se hizo eco de peores perspectivas de producción

EMILCE TERRÉ
El trigo comenzó a recuperarse hacia el cierre de la semana, sostenidos por la fortaleza de la demanda externa y el deterioro de las condiciones productivas en algunos países abastecedores claves del mercado mundial, incluido Argentina.

En el mercado local, el precio de referencia del trigo para la entrega inmediata que reporta diariamente la Cámara Arbitral de Cereales quedó el jueves EN $ 8.500/t, por encima de los $ 8.450/t de la semana anterior aunque aún algo por detrás del máximo en moneda corriente, de $ 8.650/t de comienzos de mes. La escasez de trigo disponible enfrentada a necesidades puntuales de la demanda determinó la mejora en los precios a pagar.

En relación al primer punto, las compras totales de los sectores industrial y exportador alcanzan a comienzos de octubre los 16,3 millones de toneladas, algo por detrás de los 16,6 millones anotados a la misma altura del año anterior. Sin embargo, en el contexto de una producción más ajustada, lo comercializado en relación a lo cosechado asciende en esta campaña al 85%, superando el 80% de octubre del año anterior, y muy por encima también del 68% promedio de los últimos tres años.


Respecto de las necesidades de la demanda, en lo que va de octubre se registran embarques desde puertos argentinos por algo más de 188.000 toneladas, a los cuales se le adicionan 166.500 t programadas para despacharse en lo que queda del mes, según datos que provee la agencia marítima NABSA. En este contexto, algunas exportadoras se han visto en la necesidad de originar grano para completar cargamento mejorando para ello sus ofrecimientos abiertos en el mercado hasta los US$ 205 /t para quienes estuviesen dispuestos a comprometer la descarga del cereal antes del 15 de este mes.

De cualquier modo, en el marco de una oferta total más ajustada en la actual campaña 2017/18, respecto al ciclo pasado, y frente a los voluminosos embarques de trigo registrados en el primer semestre del año, se espera que hasta el ingreso de la nueva campaña el flujo de exportaciones se mantenga por debajo del año anterior.

Según datos de la Secretaría de Agroindustria, entre enero y junio de 2018 se despacharon por vía marítima un total de 7,3 millones de toneladas, un 7% por encima de los despachos del primer semestre de 2017. Los puertos que más incrementaron sus embarques han sido San Lorenzo, desde donde salió medio millón de toneladas o un 19% más que el año anterior bajo el liderazgo de la terminal de COFCO en Timbúes, que de 330.000 toneladas embarcadas entre enero y junio de 2017 en el 2018 pasó a despachar más de 1,4 millones, secundado por Rosario, que creció un 7% a 1,3 millones de toneladas en total, en gran parte embarcados desde Punta Alvear y General Lagos.


Con el partido jugado en lo que respecta a la campaña actual, el mercado comienza a enfocarse principalmente en las expectativas para el próximo ciclo. En el mercado local, se mantiene el abanico de modalidades de compra que van desde la entrega en el mes de diciembre con un valor promedio de US$ 180/t hasta ofrecimientos en torno a los US$ 195/t para la entrega en marzo. Si bien en este segmento tampoco se alcanzan los máximos de hace unas semanas atrás, se nota en el mercado a término (MATBA) la recuperación de los precios hacia el cierre de la semana de la mano del deterioro de las perspectivas de producción.


Efectivamente, según informó GEA/BCR el miércoles, el combo de sequía, heladas tardías y granizo estaría recortando la cifra estimada de producción argentina para la campaña 2018/2019 en 2 millones de toneladas, quedando ahora en 19 millones. Sumado a ello, se agudiza la falta de agua en el oeste y centro de la región pampeana, en plena etapa crítica para la definición de rindes del cultivo. Así, se requiere la entrada de lluvias de forma inmediata para no continuar restando quintales de productividad.

Específicamente para el área productiva de Chaco y Santiago del Estero, GEA destaca que la falta se traduciría en resultados por debajo de los rindes normales para la zona. A pocas semanas de iniciar la cosecha, esta noticia es especialmente dañina en una campaña de oferta tan ajustada como la actual donde las esperanzas estaban puestas en que una buena cosecha temprana en el norte del país permitiría recobrar fluidez en el abastecimiento del grano en el mercado.

En lo que respecta al contexto internacional, esta semana el USDA (Departamento de Agricultura de EE.UU.) publicó su informe mensual de estimaciones, recortando nuevamente la proyección de stocks globales de trigo para la nueva campaña 2018/19. Según el organismo, en el nuevo ciclo la producción mundial del cereal alcanzaría a 731 millones de toneladas, en tanto que el consumo resultaría de 746 Mt. Así, la cosecha de trigo resultaría inferior a las necesidades de la demanda por primera vez en seis años, dando lugar a un notable ajuste en el nivel de inventarios. Además, al caer las expectativas de producción en Rusia, la caída de stocks finales resultaría aún 1Mt superior a la que se preveía en el informe del mes pasado.