Con hondo pesar la Bolsa de Comercio de Rosario despidió el jueves 4 de septiembre a Federico Boglione durante un sentido homenaje en el Recinto de Operaciones.

Del acto participaron familiares de quien fuera en tres oportunidades presidente de la Bolsa, junto a socios, operadores y personal de la casa que siguieron atentamente las palabras de Victor A. Cabanellas, Vicepresidente 1º de la Institución. 

Con profunda emoción, Cabanellas resaltó la trayectoria de Boglione y destacó que “la Bolsa, a la que él tanto quiso, pierde a uno de los hombres que han sabido agregarle un laurel más a su secular trayectoria”.

Palabras del vicepresidente de la Bolsa en la rueda de operaciones

La Bolsa está de luto, porque acaba de fallecer un gran Presidente de la Institución.

Federico Boglione era el prototipo del empresario. Desde que tomó las riendas de su empresa familiar evidenció sus dotes de emprendedor, dispuesto a asumir riesgos y a luchar por sus convicciones. Y no se limitó al cerrado ámbito de sus negocios, sino que se brindó generosamente por las instituciones en las que participó y por ciudad en la que nació.

Habiendo podido retirarse en su momento a disfrutar los logros alcanzados, nunca se conformó con la tranquilidad del retiro. Por el contrario, acometió permanentemente nuevos desafíos empresariales.

Federico Boglione ingresó como socio de la Bolsa en 1962, ocupó la Presidencia de la Cámara de Aceites Vegetales y Subproductos ininterrumpidamente desde 1975 hasta 1982. Fue Director Titular del Mercado a Término desde 1981 al 87. Formó parte del Consejo Directivo como Vocal hasta llegar a Presidente en el período 1988/89. Luego de un paréntesis, fue electo nuevamente en el cargo en 2001 y permaneció como Presidente hasta fines del 2005.

Como en todos los aspectos de su vida, Freddy puso en la Bolsa toda su pasión. Su gestión será recordada como la época de mayor apertura de la Bolsa a la comunidad y de compromiso con los asuntos públicos, municipales, provinciales y nacionales.

Fue impulsor de la Región Centro. En un memorable encuentro en 2002 con los Presidentes de las Bolsas de Córdoba y Santa Fe en su estancia “El Embrujo”, cercana a la localidad de El Fortín, convenció a sus pares y a los gobernadores para trabajar juntos en el relanzamiento de esa región.

Su voz era escuchada con atención e interés por sus interlocutores. Siempre se mostró partidario de rodearse de gente joven, para formarla y darle oportunidades de crecimiento.

Mantuvo un trato directo y cordial con el personal de todo nivel, tanto en sus empresas como en la Bolsa, y eso lo hizo acreedor de su cariño y consideración.

Aunque la fatalidad nos prive de su presencia física, Federico Boglione se va con la satisfacción de saberse rodeado y respetado por sus colegas, socios, empresarios y miembros de la comunidad, incluso por aquellos que algún día pudieron ser sus leales adversarios. Esta sanción unánime es la mejor ofrenda que pueda hacerse a su memoria.

Señores: La Bolsa, a la que él tanto quiso, pierde a uno de los hombres que han sabido agregarle un laurel más a su secular trayectoria.

Rindámosle un minuto de silencio en homenaje y reconocimiento.