Revista Institucional - Enero 2020
La Rosario de las tres primeras décadas del siglo XX, era otra ciudad, distinta escenografía urbana, distintos medios de transporte, distintas modas y costumbres. Esta mítica esquina de Córdoba y Corrientes era sin dudas diferente, hasta que el edificio de la Bolsa de Comercio de Rosario le dio su fisonomía definitiva.
CONTEXTO HISTÓRICO
El crecimiento comercial e industrial iniciado en la ciudad hacia finales del siglo XIX y principios del siglo XX, sobre todo de la mano del empuje inmigratorio, iba a sostenerse de modo regular hasta la década del '30, cuando comienzan a hacerse sentir las consecuencias de la crisis de Wall Street de 1929. En ese periodo se inician en la ciudad las actividades de industrias que con el tiempo, serian importantes en Rosario, como la metalúrgica y la metalmecánica, la industria textil, iniciada con la primera fábrica a vapor de bolsas de 1880, destinada a la producción de embalajes de cereales, harinas, azúcar, etc., la de la alimentación con ejemplos notables como Refinería Argentina de Azúcar, los molinos harineros y yerbateros, la producción fidera, la industria licorera y cervecera.
Es precisamente luego de 1930 cuando se produce el aumento de las industrias manufactureras en Rosario y en el país, mientras crece también la industria como un complemento de las actividades de importación y exportación y es visible un paralelo crecimiento del comercio.
En el período 1930–1960 y en especial desde mediados de los años '40, la ciudad entraría también en una etapa de desarrollo y crecimiento, camino a la gran urbe de hoy.
ARQUITECTURA
La Bolsa de Comercio de Rosario se fundó en 1884 siendo la segunda del país, el edificio que ocupa actualmente data sólo de 1929. Este surgió en 1926 como resultado de un concurso público de anteproyectos en el que se adjudicó el trabajo al arquitecto Raúl R. Rivera, bajo el lema LUZ 21.
Este edificio se inauguró el 11 de noviembre de 1929 y tiene las características de los monumentales edificios de la época, de estilo francés con detalles barrocos, como el caso del Congreso de la Nación en Buenos Aires.
Es uno de los edificios símbolo de la actividad comercial de la ciudad, construído entre los años 1927 y 1929 por la empresa Rafael Candia hijo y Carlos Isella, dentro del estilo academicista, como un modo de plasmar en él toda esa potencialidad.
Desde el exterior podemos admirar la imponente cúpula que remata el volumen cilíndrico de su esquina en ochava y las esculturas que simbolizan la ganadería, la agricultura, la bolsa y la industria, del escultor Enrique Cerantonio, que manifiestan de este modo la vinculación al potencial del agro en la región.
El primer piso se vuelca en balcón a través de amplias arquerías, sobre el hall existe un vitral octogonal gigante que sirve de techumbre.
El edificio cuenta con cinco plantas, sobre el fondo del hall se encuentra la vieja rueda de cereales, hoy parte del museo A Viva Voz, mármoles y arañas, ricas maderas, yesería, alfombras y muebles completan los sobrios detalles del interior.
En el primer piso encontramos oficinas de uso interno y el salón Cordiviola, que desde 1972, lleva el nombre de uno de los presidentes de La Bolsa y principal impulsor de la construcción de este edificio.
En el segundo piso nos encontramos con los Laboratorios BCR, la Cámara Arbitral de Cereales y el Tribunal de Arbitraje General.
En el subsuelo está ubicado el Restaurant Mercurio. La obra presenta dos realidades: una interior y otra exterior.
Por fuera, el protagonista indiscutible es el volumen cilíndrico de esquina y su gran escalinata, la gran puerta de hierro fundido con sus columnas corintias en doble altura, las esculturas alegóricas y la imponente cúpula.
Adentro, la realidad es otra: el protagonista principal es el hall central rectangular que no se expresa en el exterior, de colosal altura. Está iluminado cenitalmente por un vitral octogonal. La organización claustral permite que el mismo este flanqueado por las “ruedas”, sitios neurálgicos donde se desarrolla la actividad específica, y en el cual balconea la galería del 1er piso a través de 16 grandes arcos.
RESTAURACIONES
Actualmente el Edificio cuenta con un estado de salud excepcional. Está muy bien cuidado y es un ícono de la ciudad.
Fue declarado Monumento Historico Nacional y Patrimonio de la Ciudad, por eso siempre se mantiene en sus condiciones originales.
En diferentes ocasiones de realizaron obras de mantenimiento y salvaguarda de este patrimonio inmueble.
A raíz del deterioro causado por el paso del tiempo, la exposición a la intemperie y sucesivas capas de pintura, La Bolsa decidió restaurar el grupo escultórico que corona el frente del edificio.
Entre los años 2018 y 2019, La Bolsa de Comercio de Rosario realizó una última restauración de la fachada.
El Edifico de la Bolsa tiene 90 años. Entonces se contrató un equipo para que evalúe posibles casos de deterioro edilicio pero de manera no invasiva, en un trabajo interdisciplinar.
Para hacer el análisis de la cornisa se alquiló un súper skytrack (manipulador telescópico). Entonces, se convocó a una empresa que realiza ensayos no destructivos y que utiliza diferentes técnicas y herramientas muy útiles como a termografía, el ultrasonido, rayos x y gamma, con instrumentos portátiles que se pueden llevar a los lugares.
Así se pudo diagnosticar cuál era el mejor escenario para realizar el trabajo. Sobre todo buscando aplicar el criterio de mínima intervención, máxima consolidación.
La restauración llevó aproximadamente 8 meses. “El magnífico edificio de la Bolsa de Comercio de Rosario es un aporte más de la misma, a la ciudad que la vio nacer”.
MUSEO
Hoy su historia ha dado lugar a un museo en la planta baja del histórico edificio, en el que puede conocerse cómo se desarrolló el comercio agrícola en la región y cómo funcionaba una antigua rueda de cereales.
El Museo cuenta con 4 salas: una sala llamada Orígenes donde se cuenta los inicios de la Bolsa, el puerto, el ferrocarril, los inmigrantes; Tiempos del Centenario, dedicada a fotografías que cuentan cómo cambio la ciudad en 1910; Presente y Futuro, una sala relacionada a la actualidad donde se explica acerca de los mercados que funcionan hoy en día: Mercado Físico de Granos, Matba Rofex, Mercado Argentino de Valores y Rosgan y la Sala A Viva Voz, donde se recrea un día típico en la antigua rueda de cereales