Lo que viene, el pronóstico para la semana próxima en la región núcleo

Se repite la posibilidad de una inestabilidad para el fin de semana

Como el anterior fin de semana, hay una inestabilidad pero que promete muy poco: "acumulados sumamente escasos y de manera aislada"

Solo habrá un momento de inestabilidad, que abarcará desde la madrugada del viernes hasta las primeras horas del día domingo. Algunas lluvias muy dispares podrían producirse en el norte de la región GEA, es decir sudeste de Córdoba y sur de Santa Fe, durante la mañana del viernes. Mientras que el sábado sólo se observarían algunas precipitaciones sobre el norte de Buenos Aires. Tanto los desarrollos del viernes como los del sábado sumarían escasos acumulados y de manera aislada. El resto de la semana se mantendrá con características de tiempo estable, con nubosidad variable pero sin precipitaciones.

Las temperaturas mínimas se ubicarán dentro de los valores medios estacionales, con poca variabilidad. Sólo el lunes se espera un leve descenso, pero sin ningún tipo de riesgo de heladas en la región. En cuanto a los valores máximos, se prevé un progresivo ascenso hasta el domingo inclusive, con temperaturas superiores a los promedios. Durante la jornada del lunes, se espera un moderado descenso que llevará nuevamente las marcas térmicas a niveles normales para la época del año.

La cobertura nubosa presentará mucha variabilidad, especialmente entre el viernes y sábado, que serán los momentos de mayor inestabilidad en la región. El resto de la semana el cielo permanecerá mayormente despejado en toda la zona GEA.

La circulación del viento prevalecerá del sector norte en el comienzo del periodo, manteniendo las temperaturas en leve ascenso. Esto perdurará hasta el domingo, ya que luego rotará al sector sur de manera temporaria, con leve intensidad. A partir del día lunes, el viento volverá a cambiar al sector norte, fomentando nuevamente el ascenso de las marcas térmicas.

Por último, se destaca que la humedad en las capas bajas de la atmósfera también mostrará condiciones variables, con un progresivo incremento entre el jueves y el domingo, y una moderada disminución durante el resto de la semana.

Lo que pasó con el clima en la última semana en la región núcleo

Semana casi sin lluvias

Sólo en Buenos Aires y Santa Fe se observaron algunas lluvias, aunque los acumulados no superaron los 3 mm.

Entre los datos más destacados se puede mencionar a la localidad de General Pinto, con 2,2 mm, seguido de Lincoln, con 2 mm. Córdoba, parte de Santa Fe y el oeste de Buenos Aires, no registraron precipitaciones.

Las temperaturas, en promedio, se mantuvieron dentro de los valores normales para la época del año, con una importante diferencia entre el sur y el norte de la región. Las máximas, sobre el norte de GEA, se ubicaron entre 26 y 28ºC siendo inferiores a las de la semana pasada. Mientras que sobre el norte de Buenos Aires oscilaron entre 23 y 25ºC. El dato más destacado se midió en la localidad de Idiazabal, con un registro de 28,8ºC. Las mínimas se presentaron inferiores a la semana pasada y muy por debajo de los parámetros normales para el mes de octubre, con marcas entre 3 y 5ºC. El valor más bajo fue el de la localidad de Rojas, con 2,6ºC.

Se pueden observar que persisten condiciones totalmente opuestas entre el sector sur y el norte de la región GEA. La porción sur, presenta condiciones hídricas adecuadas mientras que, sobre el resto de GEA, la humedad del suelo sigue siendo nula, manteniendo las condiciones de sequía.

Para los próximos 15 días, se puede ver que la necesidad hídrica en Córdoba sigue siendo extrema, con registros de hasta de 120 mm para recomponer la humedad en el perfil del suelo y alcanzar niveles óptimos, mientras que Santa Fe mantiene una necesidad de 80 a 100 mm. El norte de Buenos Aires no necesita lluvias para mantener características de humedad adecuadas.

Extensión GEA: O de Córdoba, N de Santa Fe, Santiago del E. y Chaco por el Dr. en Cs. Atmosféricas José Luis Aiello

"El ingreso de aire frío con que arrancó octubre no es favorable"

La primera semana de octubre no aportó argumentos que modifiquen la gran incertidumbre que generan los cultivos de las áreas productivas fuera del territorio bonaerense.

Las precipitaciones del final de septiembre marginaron casi por completo a las provincias del centro norte del país. Sólo algunas precipitaciones débiles y muy aisladas acompañaron el cierre del mes.La oferta de agua fue extremadamente pobre en el NEA, aunque no es rara la ausencia de lluvias sobre el NOA. Esa región durante septiembre todavía transita su estación seca, escenario que no cambia significativamente en octubre.

Las localidades costeras de Buenos Aires, en el entorno de Balcarce, Mar del Plata y Tres Arroyos fueron las más beneficiadas en el arranque del nuevo mes. Recibieron precipitaciones que permiten sostener las reservas en valores relativamente normales.

Pero la disponibilidad de agua en el suelo es cada vez más crítica sobre la zona central del país. La condición de las reservas se aleja significativamente de los valores normales en la región norte, en Córdoba y avanza sobre Santa Fe. La gravedad de la situación es tal que la precipitación necesaria para alcanzar reservas de humedad óptimas en toda región mediterránea se ubica entre los 120 y los 180 milímetros. Esos registros equivalen al valor medio de los acumulados de los meses que van de abril a septiembre, considerando, para la estadística, los últimos treinta años. El déficit hídrico que afecta los cultivos del centro al norte argentino equivale a las lluvias medias de los seis meses del periodo frío de nuestro país.

La primavera avanza bajo condiciones hídricas ajustadas o de sequía sobre las provincias del centro tras la persistente falta de precipitaciones que viene extendiéndose desde el comienzo del otoño. Los oportunos alivios pluviales permitieron avanzar con las siembras de la fina y posteriormente con el arranque de la gruesa. Pero el comportamiento de las lluvias está marcando una proyección de rendimientos con techo en los valores normales, incluso mucho más desfavorables a medida que avanzamos hacia territorio mediterráneo.

Las necesidades hídricas de los cultivos están muy lejos de la oferta de agua que puede proveer la primera quincena del mes. El ingreso de aire frío con que arrancó octubre no es favorable y puede provocar la continuidad de la escasez de lluvias en la zona central del país. Es posible que se produzcan desarrollos menores durante la segunda quincena del mes. Pueden servir para mantener la húmeda del perfil, pero sumar más de cien milímetros parece un objetivo poco probable ante este panorama.