El trigo cotizó al alza, dado que los pronósticos indican que gran parte del sur de Rusia recibiría pocas lluvias en las próximas dos semanas, mientras que también se prevé que partes de Kansas, el principal estado productor de trigo de Estados Unidos, permanecerán secas. Asimismo, el último ataque de Moscú en la ciudad portuaria ucraniana de Odesa volvió a centrar la atención en los riesgos de suministro de la región del Mar Negro.

El maíz anotó ganancias, impulsado por el temor a que las lluvias excesivas frenen el rápido ritmo de siembra en el Medio Oeste de Estados Unidos. Asimismo, las lluvias torrenciales caídas en Rio Grande do Sul, el estado más meridional de Brasil, están perturbando las últimas fases de la cosecha de soja y maíz. Cabe destacar que los fondos de materias primas mantienen una gran posición corta neta en los futuros de maíz, lo cual deja al mercado vulnerable a los repuntes de cobertura de cortos.

La soja se disparó fuertemente al alza, debido a las fuertes inundaciones que azotaron el sur de Brasil, donde el 34% de la cosecha de soja sigue sin cosecharse. "Estas lluvias muy voluminosas, sin pausas soleadas para cosechar, siempre acaban causando pérdidas de calidad", dijo Adriano Gomes, analista de granos de la consultora AgRural.

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